Berriel adelantó que para la aprobación de la simplificación de los trámites que desarrolla la Ley, se necesita "un cambio profundo de mentalidad, que lleve a la menor intervención posible" y, para ello, -continuó- "es también necesaria una profesionalización". El consejero explicó que las sociedades en las que se puede rebajar la burocracia se caracterizan por "una sociedad civil que se regula a sí misma, a través de una gran profesionalización y con un alto grado de responsabilidad de cada uno de los participantes en un determinado proceso".
En este sentido, indicó dos aspectos que pretende cambia el nuevo texto y señaló el de la profesionalización de los equipos redactores del planeamiento como el que "producirá una reacción segura", en distintos estamentos e instituciones. Fue al hablar de la necesidad de contar con equipos profesionalizados, acreditados y, sobre todo, responsables de los documentos que presenten, para poder rebajar los trámites institucionales sobre el planeamiento, cuando Berriel apeló al consenso y a la valentía de los parlamentarios de la Cámara Autonómica.
Como segundo factor relevante para agilizar todos los trámites, el consejero habló de "separar el polvo de la paja", dejando el planeamiento pormenorizado bajo la competencia exclusiva de los ayuntamientos, de forma que no retrase la tramitación de otros Planes de mayor trascendencia y en los que el resto de administraciones sí deben intervenir.
En este sentido, el titular autonómico de Política Territorial lamentó que no se trabaje en el mismo sentido desde todas las administraciones. El consejero recordó que "existe una legislación básica estatal y otra europea que son de obligado cumplimiento y que imponen unos plazos que no nos podemos saltar". "Es más" ¿concluyó Berriel- "en una reciente modificación legislativa, se amplió el plazo para que Aviación Civil emita sus informes obligatorios y vinculantes a los instrumentos de ordenación territorial, desde los 3, hasta los 6 meses".