Narvay Quintero ha manifestado en el Parlamento que "afrontar este asunto tiene un fuerte componente de colaboración interadministrativa, pues son muchas las competencias concurrentes en la materia, desde Ayuntamientos, hasta Cabildos, el Gobierno de Canarias y el del Estado". El consejero ha informado que desde 2015 se viene recabando de las corporaciones insulares, responsables de la planificación hidrológica de las islas, las necesidades en esta materia para diseñar con ellas y el Estado las futuras inversiones que respondan a esas necesidades.
Además, recordó que de forma coordinada con los cabildos "el Gobierno asumió las competencias de forma temporal para elaborar los planes del segundo ciclo del agua el pasado mes de junio y un mes después estaba adjudicada su redacción por un importe de un millón y medio de euros". El objetivo es tenerlos aprobados antes de septiembre de 2018 para cumplir con las condiciones que plantea la Unión Europea.
El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas ha informado de que "se está elaborando un protocolo que se está debatiendo con el Gobierno de España para garantizar la planificación durante los próximos doce años". "Este protocolo", ha añadido, "se desarrollará mediante tres convenios de cuatro años y su contenido está en estos momentos en negociación con el Estado". Además, Quintero ha indicado que se destinarán otros 10 millones de euros "para obras que no se han declarado de interés general y que responden a la dispersión urbanística y núcleos de población menores que necesitan del apoyo del Gobierno autonómico para afrontar sus necesidades".
Destacó así mismo el objetivo de que el sistema de usos del agua de Canarias incluya "el tercer ciclo que incluya, como ya se hace en algunas infraestructuras ya en funcionamiento, la posibilidad de usos de aguas depuradas en el sector primario, abaratando los costes para los agricultores y ganaderos del Archipiélago".