En este encuentro, que se celebró en la localidad italiana de Venafro, Darias consideró imprescindible que la ciudadanía europea conozca "cuáles han sido las causas por las que no se ha cumplido el compromiso con los refugiados anunciado en 2015 por el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker". El líder europeo hizo público en aquel momento el acuerdo de esta institución para que los gobiernos de la UE asumieran cuotas obligatorias de refugiados, así como que aumentaran sus ayudas al desarrollo a los países de origen.
Viajes sin retorno
La presidenta explicó que, según los últimos datos oficiales, "hay 244 millones de personas desplazadas en el mundo, de las cuales 65 son desplazadas forzosas y de ellas 21 millones son refugiados y refugiadas". "Estos viajes son, en la mayoría de los casos, sin retorno, historias de esperanzas rotas, con horizontes inciertos y con un frío acompañamiento de la cerrazón y la insolidaridad", afirmó.
Darias defendió la política como "potente palanca de transformación social" y reivindicó una vez más el papel de las regiones en las respuestas a los desafíos de Europa y en la gestión de los movimientos migratorios y de las personas refugiadas. "Europa sin las regiones no será nada, Europa es de las regiones", afirmó la presidenta, quien admitió que los presidentes y presidentas de la CALRE "tenemos mucha tarea por delante".