Indianos llegados de todos los puntos de canarias en barco y en avión se sumaron a la fiesta palmera más popular.
En esta ocasión hubo menos participación debido a la previsión de lluvia que marcaba hasta un 90% de probabilidades. Al final no llovió y la fiesta transcurrió con total normalidad.
Un operativo de unas 100 personas se afanaba desde las cuatro de la mañana para dejar bien limpia la ciudad. En total se han reogido unas 40 toneladas de basura.