Las exposiciones harán un recorrido por la intrahistoria del municipio a través de personas tan singulares como el alfarero Justo Cubas, el constructor de instrumentos musicales de cuerda Francisco Rodríguez, la tejedora Nilia Bañares, la familia de cuchilleros conocidos como "Los Vaineros" o la multitud de talleres de carpintería y tallistas que tuvo Telde, detalló el concejal de Cultura, Juan Martel.
La reparación de las techumbres de tejas de tierra samora y tilla, así como de la carpintería, que empezará a final de marzo, se contempla una inversión de 20.800 euros, en tanto que la compra de vitrinas, maniquíes, audioguías y una pantalla de gran formato, así como los fondos para la exposición permanente tales como vestimenta tradicional, enseres de baño o cocina y aperos de labranza contarán con 20.000 euros. Estos objetos lucirán en estancias como la cocina, muy bien conservada, y en dos alpendres que también mantienen su aspecto original, con un empedrado en muy buen estado.
Entre las salas previstas destacan una polivalente para acoger actos y proyecciones, una dedicada al "Ciclo del año" para repasar las fiestas tradicionales, desde el Carnaval, al Día de Canarias, San Juan o Los Finados, también exposiciones temporales de artesanos relacionados con cada una, y otra dedicada a la alfarería desde sus orígenes hasta los trabajos actuales. Las fibras vegetales, los instrumentos o incluso los muebles también tendrán su espacio en los pasillos o salas compartidas.
La consejera y el concejal mantuvieron este miércoles una reunión técnica para repasar los detalles de este proyecto que, según destacó Alonso "congenia a la perfección con la vocación de la FEDAC, que no es otra que sacar el patrimonio a la calle, y que las personas que visitan Gran Canaria, pero sobre todo la ciudadanía canaria, conozca y tenga apego a sus señas de identidad, condición indispensable para construir una Gran Canaria de futuro, sostenible y formada".
De hecho, agregó el concejal, el proyecto contempla potenciar la parte baja que rodea el patio central para impartir talleres relativos a estos oficios como labor complementaria a las salas de exposición de la parte alta. "Se trata de devolver este edificio a sus orígenes, convertirlo en un espacio que la ciudadanía pueda disfrutar" con el apoyo del Cabildo, no solo económico, sino de asesoramiento y coordinación de su Fundación para la Etnografía y el Desarrollo de la Artesanía Canaria.