Este año han intervenido alrededor de 300 actores y actrices amateurs y algunos profesionales a los que se suma el personal técnico y logístico que contribuye a que esta representación tenga lugar año tras año. La Pasión supone uno de los encuentros culturales más singulares e identificativos del municipio, además de ser uno de los actos en los que más personas participan y uno de los más complejos a nivel técnico. La Pasión se ha convertido en una seña de identidad y de convivencia pacífica entre los adejeros y adejeras.
Aunque los datos oficiales de audiencia no estarán disponibles hasta el lunes, 10 de abril, el año pasado (2022), sólo en televisión se alcanzaron los 200.000 personas espectadoras a las que hay que sumar las que vieron la representación a través de las diferentes redes sociales. Este año La Pasión se ha emitido a nivel nacional por 13 Televisión, a nivel regional la Televisión Canaria y Mírame Televisión, en la geografía insular lo hicieron Canal 4 televisión, Canal 10 TV, la emisora municipal Radio Sur Adeje 107.9 FM y las redes sociales del propio Ayuntamiento adejero.
Esta singular obra teatral está organizada por el Ayuntamiento de Adeje en un trabajo transversal en el que se ven implicadas numerosas concejalías, todas ellas bajo la supervisión del alcalde del municipio, José Miguel Rodríguez Fraga. La dirección de la representación de La Pasión estuvo a cargo, en esta vigésima sexta edición, de Abraham Gómez, la coordinación y producción de Alberto Álvarez, la dirección artística fue obra de Freya Jaén. Como cada año, el personal municipal, así como responsables de atrezzo, escenografías, vestuario, peluquería y maquillaje, estuvieron presentes en este día, a quienes se sumaron cámaras, fotógrafos y hasta el equipo de redacción, redes sociales, web y radio.
La representación
La puesta en marcha de esta gran obra teatral de casi dos horas de duración, tiene lugar en la Calle Grande y Plaza de España de Adeje. La Pasión se inicia con la entrada mesiánica de Jesús, lo que se conoce como el Domingo de Ramos, donde tiene lugar el diálogo "Dejad que los niños se acerquen a mí porque de ellos será el reino de Dios".
Este año, la novedad más significativa ha sido la incorporación de una nueva escena, la expulsión de los mercaderes del templo, la cual tuvo lugar tras la entrada mesiánica. En esta escena, se observó a un Jesús diferente, más intenso y preocupado por la pureza propia de fe y se pudo escuchar la frase "mi casa será llamada casa de oración", motivo por el cual Jesucristo expulsaba a los mercaderes del templo, porque ajuicio del mesías, con sus compras y ventas, deshonraron al Padre exactamente en el lugar donde él debía ser más honrado.
Seguidamente, tuvo lugar la última cena, donde Jesús advirtió a sus apóstoles que debían respetarse unos a otros de la misma forma en la que él les había amado. El pan y el vino simbolizan la vida eterna, el cuerpo y sangre de Jesucristo que fue ofrecido a sus discípulos en la Última Cena.
A lo largo de la Calle Grande, se fueron sucediendo las escenas que representan los últimos momentos de la vida de Jesús. Entre las más significativas destacan el juicio de Poncio Pilatos, Herodes, el encuentro con Judas, la oración en el Huerto de Los Olivos, el encuentro con la madre hasta llegar a la culminación de la obra, en la Plaza España donde se levantaban ya dos cruces ante un escenario excepcional con el barranco del Infierno como telón de fondo.
El papel de Pilatos fue reproducido por Raúl de Castro, a quien le acompañó su esposa Claudia, que fue encarnada por Mónica Panizzi. En esta escena, se pregunta al pueblo ¿a cuál de estos dos hombres queréis que suelte a Jesús o a Barrabás? Tras la decisión del pueblo, Pilato manda a dar latigazos a Jesús, quien posteriormente fue crucificado y libera a Barrabás por decisión del pueblo. Antes de que Jesús partiera, Pilato suscribe "no me hago responsable de la muerte de este hombre". A Herodes y Herodías le dieron vida Yiyo Alonso y Ana Niebla, respectivamente. En esta escena se pudo ver como Jesús soportó los insultos de ambos gobernantes, quienes también se burlaron de su supuesto poder divino.
La escena de la crucificción, la más significativa de toda la representación, se inició con el recorrido tortuoso de Jesucristo, quien bajo los latigazos de los romanos se despide de su madre por última vez. Con la cruz a cuesta, Jesús, interpretado por el actor Ignacio de La Lastra, llegó a su fin. En este punto, lo acompañaron la Virgen María, que fue interpretada por Ana Oneida Borges Medina, junto a María de Cleofás a la que dio vida Sonnibel Mendoza, San Juan fue representado por Gabriele Zizzi y María Magdalena, cuyo papel encarnó Ania González,quien además cantó en riguroso directo, puso punto final a esta estremecedora obra de teatro.
Trabajo en equipo
La Pasión de Adeje supuso varios meses de trabajo y montaje, días y noches de ensayo que se prolongaron hasta altas horas de la madrugada. Cada año, se forma entre los actores y actrices una comunidad de personas unidas por un sentimiento común que perdura año tras año.
En esta edición, al igual que la anterior, se llevó a cabo un casting para poder escoger los papeles principales, entre los que destaca el de Judas Iscariote, representado por José Antonio Sánchez Fernández, los sacerdotes del templo como Caifás y Anás, fueron interpretados por Roberto Melo López y Nicolás Tenías, respectivamente. Sergio Vargas dio vida al papel del apóstol Pedro, quien negó tres veces a Jesús antes de que el gallo cantara, tal y como había advertido el mesías.
Historia de La Pasión de Adeje
La Pasión de Adeje nació de forma espontánea de la iniciativa de un grupo de vecinos y vecinas en el año 1996, poco a poco fue creciendo con el apoyo del ayuntamiento de Adeje hasta convertirse en lo que es hoy: una seña de identidad del pueblo además de uno de los atractivos turísticos del municipio en la Semana Santa. Desde hace algunos años el consistorio optó por la emisión del evento por televisión para poder dar a conocer esta muestra cultural popular propia.
Una de las características de la representación que tiene lugar en Adeje es que se intenta ser lo más fiel posible a la época, tanto en lo que se refiere a la vestimenta como al atrezzo. Con el tiempo, se fueron incorporando temas musicales propios compuestos por el Diácono del municipio, Manolo Hernández Trujillo y con arreglos musicales de la Escuela Municipal de Música de Adeje, bajo la dirección de Juan Carlos Coronado. Como cada año, se contó con la colaboración de la asociación la Librea de Valle Guerra.
La música siempre ha jugado un papel relevante en La Pasión de Adeje, algunas de las personas que han participado en ella han sido, con el tiempo, reconocidos cantantes, como es el caso del tenor Jorge de León, que interpretó a Jesucristo durante un par de años, o Agoney Hernández quien interpretaba el papel de San Juan o Ainhoa Aguilar, que también representó a María Magdalena. Este año y como otra novedad significativa, la música volverá a ser protagonista en La Pasíon.