El recorrido, que consta de 300 kilómetros y se atravesará dos veces, intercalará pistas rápidas con algún camino sinuoso y, además, será la carrera más larga de Europa de un solo día.
Rovira comenta que "llevamos más de dos años evolucionando este coche" y, tras correr en las Islas, por ejemplo, en el Rally de Tierra de Gran Canaria, donde quedó segundo de su categoría y duodécimo en la general, "hemos creído que es el momento de dar el salto a la Península y correr un raid". Así, Remigio Rovira tiene pensado disputar las dos últimas pruebas del Campeonato de España, siendo ésta la primera y, la segunda, en octubre, la de Baja Barrachina.
Se trata de una carrera "non stop" y lo que marca la diferencia con las demás carreras es la ausencia de tramos de enlace entre las dos pasadas y, especialmente, que el cronómetro no se para en ningún momento, ni siquiera en los repostajes ni en las asistencias, cuando los equipos deberán reparar sus monturas con la presión de hacerlo en el menor tiempo posible. Cabe destacar, según el reglamento de esta carrera, que se permitirá el repostaje y la asistencia al finalizar la primera pasada, es decir, transcurridos los primeros 300 kilómetros del recorrido.
El vehículo, que ya está en la Península, será asistido por el mecánico Alexis Reyes, propietario del Taller ORC de La Victoria de Acentejo, que ha llevado el mantenimiento del todoterreno. Cabe destacar que el traslado y logística del vehículo a la Península se ha hecho con Jaton Racing, empresa especializada en Toyota Hilux y que, además es la escudería del todoterreno de Rovira, quien partirá para Burgos el día 20.
Remigio Rovira, propietario de Vadebicis, destaca la preparación de su vehículo, que conducirá junto a Nacho Espino como copiloto, y es que "se ha modificado todo". Por ejemplo, se ha dotado al Toyota de hasta 210 caballos de potencia, se han instalado dos amortiguadores por rueda, se ha puesto el depósito de gasolina en el interior del habitáculo y se han extremado las medidas de seguridad, por citar sólo algunos cambios. Porque lo que busca Rovira ante todo es la "fiabilidad" del coche, que aguante "bien" toda la carrera y que llegue al final. Además, para el propietario de Vadebicis es muy relevante también "comparar cómo estamos con respecto a los equipos de la península, para saber a qué atenernos". Por otra parte, el corredor destaca que en Canarias "no hay experiencia para la preparación de todo terrenos, y menos hasta T1 que es la máxima, y por eso ha costado mucho tiempo y esfuerzo en llegar a hacer este vehículo fiable".
No obstante, cabe destacar la dilatada experiencia de Remigio Rovira en el mundo del motocross y del motociclismo, pues empezó a correr en el año 1985. Ha disputado más de una decena de veces el Dakar, el Rally de los Faraones, la Baja de Aragón... por ello afronta ahora "con mucha ilusión y ganas este nuevo reto con los todoterreno".