El informe, presentado a bordo del barco Arctic Sunrise, que se encuentra en Barcelona, demuestra que la sostenibilidad ambiental, la económica y la social están fuertemente interconectadas y evolucionan de forma paralela, lo que ha provocado que la nefasta política pesquera europea, cuyo modelo aún defiende el Gobierno español, se haya traducido en la pérdida de miles de empleos en el sector (52.000 empleos netos desde 1992) y en el agotamiento de los caladeros.
La Política Pesquera Común, que actualmente se encuentra en proceso de revisión en Bruselas, ha potenciado durante años a los grandes buques industriales con una gran capacidad de captura y de destrucción, en perjuicio de la flota artesanal, mucho más respetuosa con el medio ambiente y que ofrece empleos más estables e inclusivos.
Los resultados del estudio demuestran que la pesca artesanal, además de ser buena para los océanos, es económicamente viable por lo que Greenpeace pide los Gobiernos central y Canario que apuesten por una política pesquera que tenga a los pescadores en su epicentro, lo que no solo repercutiría positivamente en el empleo, sino también en la salud de los océanos.
"Los resultados demuestran que la actual política pesquera ha puesto en una grave situación de vulnerabilidad a numerosas comunidades locales", ha declarado Mario Rodríguez, director ejecutivo de Greenpeace. "El Gobierno español no valora la importancia económica y social además de medioambiental de la pesca sostenible en un momento en el que los océanos no pueden soportar el ritmo actual de pesca."
Algunos de los principales resultados del estudio son:
• La pesca artesanal está frenando la caída del empleo en el sector ya que, mientras la pesca no artesanal ha destruido un 31% de su empleo en los últimos cinco años, la pesca artesanal lo ha incrementado en un 12,2% en el mismo periodo.
• El estado de explotación de los stocks pesqueros afecta directamente a las personas que viven de ellos. En el año 1966 se alcanza el nivel máximo de capturas, 1.455.000 toneladas, una cifra que comienza a descender hasta que en el año 2010 se sitúa por debajo del millón de toneladas. La evolución del empleo es muy similar, y disminuye al igual que las capturas.
• En los últimos veinte años en el territorio nacional, la pesca española ha destruido 52.000 empleos netos, por lo que el empleo en el sector ha disminuido un 60% con respecto al año 1992.
• El sector pesquero canario emplea en la actualidad a unas 2.125 personas (1), lo que representa un 4,4% del empleo total del sector a nivel nacional.
• La pesca artesanal es la que genera un mayor número de puestos de trabajo en la autonomía. El 54,1% del empleo en la pesca canaria (sin incluir la acuicultura marina) corresponde a la pesca artesanal.
"Es evidente que la pesca artesanal sostenible no solo es más sostenible en términos ambientales sino también sociales", ha declarado Celia Ojeda responsable de Océanos de Greenpeace. "Greenpeace demanda al ministro Arias Cañete que apueste en Europa por un reforma radical de las pesquerías y dejar de defender un modelo insostenible. Arias Cañete debe defender la pesca sostenible porque es el futuro".