La iniciativa sobre la pesca artesanal supone el respaldo europeo a estas pesquerías tradicionales, entre ellas las canaria, que apuestan por el empleo de técnicas de pesca selectivas con un mínimo impacto ambiental, y a sus peticiones de que se realice una distribución de las capturas forma más equitativa y justa.
Este hecho se suma a la aprobación, la semana pasada, por parte del Congreso de los Diputados, "tras ocho años de lucha" de una iniciativa que solicita un nuevo reparto de las cuotas que no perjudique a la flota artesanal canaria.
"En febrero una delegación integrada por representantes del Gobierno de Canarias y de las cofradías de las islas nos desplazamos al Congreso de los Diputados a explicar cuál era la situación, salimos muy satisfechos del resultado de una reunión cuyas conclusiones se materializaron la semana pasada con la decisión de la Cámara Baja", explicó Quintero.
Sobre la consideración de las RUP en los tratados con otros países, Quintero remarcó la necesidad de esta protección debido a la debilidad de la estructura productiva de estas regiones frente a países que compiten en situación de ventaja. "Estamos viendo como nuestras producciones, de no producirse esa excepción, estarían condenadas a competir en total desigualdad con producciones con menor coste y peor calidad".
"Al mismo tiempo", añadió, "es de suma importancia para nuestros pescadores que en los últimos años han visto que tratados bilaterales les ha reducido las posibilidades de pesca en caladeros cercanos con los que antes existía un acuerdo", remarcó.
Quintero insistió en que esto es una muestra más de que en algunas cuestiones debemos trabajar juntos, "ya que unidos somos más fuertes y eso se verá reflejado en el trato que reciba nuestra comunidad autónoma".