Desde el Cabildo de Fuerteventura no se discute el respaldo a la protección de la lapa majorera pero sí se plantea que, al igual que se hizo en el litoral de la Punta de Jandía, se pueden definir zonas de difícil acceso para que se conviertan en 'viveros' de esta especie endémica y permitir la pesca de caña y el acceso en el resto de áreas. En este sentido, desde la Corporación insular se reitera que el pescador tradicional de caña suele convertirse en el mejor vigilante de la costa.
La Comisión del Plan de Recuperación de la Lapa Majorera está integrada por el Gobierno de Canarias, el Cabildo de Fuerteventura, el Ministerio de Medio Ambiente, la Demarcación de Costas de Canarias, la Dirección General de Pesca y varios expertos.
La Corporación insular interpuso un recurso contra el Decreto 161/2015, de 3 de julio, para que se aborde la recuperación de la lapa majorera manteniendo los usos tradicionales en la costa redefiniendo la zona de conversación.
El conjunto de medidas planteadas por los expertos de Medio Ambiente buscan la recuperación de la población en Fuerteventura, y a largo plazo la introducción en su antiguo ámbito de distribución (que incluye a Lanzarote y los Islotes). La señalización y regulación de los accesos, la prohibición del marisqueo en zonas críticas, mayor implicación en la vigilancia o la prohibición de la comercialización de lapas en época de veda son algunas de las condiciones necesarias para salvar la especie en Canarias.