El Área de Artesanía del Cabildo de Fuerteventura colabora con los artesanos de la Isla apoyando su participación en las ferias insulares y locales de todo el Archipiélago, al tiempo que promociona las actividades artesanales propias de la cultura majorera montando stands en muestras y exposiciones de toda Canarias.
En el caso del calado, se trata de una de las labores artesanales con mayor arraigo en la sociedad de Fuerteventura, pues a lo largo del último siglo se ha desarrollado incluso una variedad propia de la isla denominada redondillo majorero.
La llegada del calado a Fuerteventura se remonta, al menos, al siglo XIX, fecha en que se han citado las primeras referencias a esta técnica asociada a la población que se asentó en la Isla tras la conquista europea.
A lo largo del tiempo, el calado ha seguido una evolución propia, existiendo en la actualidad una gran variedad de labores de calado que han derivado incluso hasta modelos más modernos asociados a la artesanía creativa. En la actualidad, la técnica del calado se conserva con mayor presencia en las Islas de Tenerife, Gran Canaria y Fuerteventura.
La técnica del calado consiste básicamente en el deshilado de la parte de una tela patrón, que luego se zurce o une en manillas formando un diseño geométricamente lineal con dibujos caprichosos y muy hermosos.