El objetivo de esta acción formativa, que ha completado 200 horas de formación entre el 24 de octubre y el 19 de diciembre, es la intervención social con familias en exclusión social o en riesgo de padecerla. Álvarez destacó que "se trata de ofrecer un apoyo para incentivar la inserción de estas personas y la prueba es que el resultado ha dado sus frutos porque tras el cierre del curso de cocina, muchas personas se han formado y algunos han encontrado un empleo".
La responsable del IMAS afirmó además que "los servicios sociales tenemos la obligación de tratar los casos de emergencia pero también prevenir y ofrecer mecanismos que mejoren la autoestima, la capacidad de buscar un empleo así como la formación en personas que necesitan una especial atención"
Cruz Roja y el IMAS mantienen un convenio anual, con una subvención municipal de 50.000 euros que permiten llevar a cabo distintas acciones formativas y de inserción, que se seguirán llevando a cabo en 2015 debido al éxito obtenido.