De las cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social de empresas y trabajadores, existe un porcentaje que se destina al denominado fondo de formación continua bonificada. Con ese dinero se financian cursos de formación de los que los empleados en activo, y las empresas, pueden aprovecharse para mejorar sus habilidades y competencias profesionales, o adquirir nuevas aptitudes con las que reforzar su desempeño.
Las empresas que lo requieran pueden encomendar a la Cámara de Comercio, de forma gratuita, la tramitación de ayudas y la gestión de las acciones formativas. También se les orientará para conocer desde el 1 de enero de cada año el crédito formativo que corresponde a la empresa y se les ofrecerá ayuda especializada para optimizar al máximo las cantidades subvencionadas.
Según expone la directora general de la Cámara de Comercio, Lola Pérez, "las empresas deben participar, continuamente, en el proceso de mejora de sus trabajadores con medidas como la formación continua, la innovación, ofreciendo prestaciones y fomentando la vinculación con los proyectos". A su juicio "el reciclaje formativo es fundamental para actualizar los conocimientos, ya que hoy en día evolucionan de forma más rápida y es necesaria una actualización constante".
Asimismo, desde la Cámara, especialistas en formación empresarial ayudarán a cada solicitante a analizar las prioridades de formación que correspondan con su actividad y la cualificación de sus recursos humanos, así como a diseñar los módulos formativos más adecuados a sus necesidades. También se les ofrece la posibilidad de evaluar la rentabilidad de la formación, analizando los resultados en la mejora de la productividad de su empresa.
Por otra parte, los resultados del último informe de la Fundación Tripartita para la Formación en el Empleo revelan que sólo 14.915 empresas de las Islas mejoraron la cualificación de sus plantillas aprovechando este mecanismo. Además, solo el 23,7% de los trabajadores asalariados del sector privado de Canarias cursó acciones formativas financiadas a través de bonificaciones en las cuotas empresariales a la Seguridad Social, mientras que la media nacional sitúa la cobertura de esta formación subvencionada en el 36,2 % de los trabajadores del sector privado.
Para una empresa de un sector medio, con unos salarios de tipo medio, y unos 50 empleados, esta cantidad puede rondar los 2.600 euros anuales. En el caso de empresas de nueva creación o cuando se acredite la incorporación de nuevos trabajadores, los solicitantes cuentan con un crédito por empleado mayor para acciones formativas.