Los plazos medios de pago con los autónomos de las administraciones públicas en el primer semestre de 2017 son de 71 días, tan sólo un día menos que en diciembre de 2016 (72 días). Por primera vez, las administraciones autonómicas son las que pagan en menor tiempo, en 54 días, de media, pero sin cumplir lo que establece la ley (30 días), a ser las únicas que han reducido los periodos medios de pago en lo que llevamos de año, concretamente en 10 días, frente al aumento registrado tanto en la administración central y en la local.
Así, las administraciones locales pagan de media sus facturas a los autónomos en 88 días (frente a los 80 de diciembre de 2016) y la central en 68 días de media, al registrar un elevadísimo aumento en el periodo analizado por ATA de 25 días (pasando de los 43 días en diciembre de 2016 a los 68 de junio). Hay que tener en cuenta que la administración central es la administración a la que menos servicios prestan los autónomos.
Para la realización de este informe la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, ATA, utiliza para el cálculo del periodo medio de pago la fecha de emisión de facturas o entrega de mercadería hasta su pago efectivo, metodología diferente a la utilizada por el ministerio de Hacienda y AA.PP. que utiliza desde la convalidación de la factura por parte de la administración competente hasta el pago efectivo. Esto da un margen de entre 28 y 32 días que es lo que se tarda de convalidar las facturas por parte de las Administraciones.
Las administraciones autonómicas, únicas donde se reducen los periodos medios de pago
La media de tiempo de espera para cobrar sus facturas de los autónomos que trabajan con las administraciones regionales en de 54 días, prácticamente dos meses. A pesar de esto, han sido las únicas en realizar un esfuerzo en reducir los tiempos de pago a sus proveedores autónomos y han logrado reducir el tiempo de espera en 10 días de media durante el primer semestre de 2017.
Sin dejar de tener en cuenta que hablamos de los periodos medios de pago en el primer semestre del año, la Comunidad de Madrid y La Rioja son las administraciones que más tardan en pagar a los autónomos, 82 días de media, es decir, casi tres meses. Les siguen Cantabria (74 días de media) y Aragón y Galicia, ambas con 64 días de media. Por el contrario, hay que valorar el trabajo de las administraciones autonómicas de Navarra y Murcia, que cumplen con los plazos establecidos por la Ley de morosidad y pagan a sus proveedores autónomos en 22 y 32 días de media, respectivamente. Aquí cabe destacar el importante esfuerzo realizado por la Región de Murcia que ha logrado reducir en 67 días en lo que llevamos de año el periodo medio de pago, pasando de los 99 días de media en diciembre de 2016 a los 32 de junio de 2017.
Únicamente cuatro administraciones autonómicas han aumentado los periodos medios de pago en el primer semestre del año, destacando el caso de País Vasco (de los 30 días a los 49), que si bien al inicio del año cumplía con lo que establece la Ley de Morosidad, ahora ha dejado de hacerlo. La Rioja también ha pasado de hacer frente a las facturas emitidas por autónomos de los 63 días en 2016 a los 82 en el primer semestre del año, y la Comunidad de Madrid y Galicia, con un crecimiento de 9 días, de media, en la Comunidad de Madrid (de 73 a 82 días) y de 5 en el caso de Galicia, donde los proveedores tienen que esperar, de media, 64 días, para el cobro de sus facturas.
Por su parte, los mayores descensos en periodos medios de pago de las administraciones autonómicas los han registrado, además de Murcia (-67 días), la Comunidad Valenciana (-40 días, pasando de los 95 a los 55 días) e Islas Baleares (-28 días, de los 84 a los 56 días, de media).
El consejo insular de Ibiza (11 días) el que antes paga a sus proveedores autónomos.
El informe sobre la Morosidad pública de ATA se fija también en los tiempos de demora de las diputaciones provinciales con los autónomos. En el primer semestre de 2017, el consejo insular de Ibiza (11 días), junto con las diputaciones de Zamora y Salamanca (20 días), de Córdoba (21 días) y el cabildo Insular de la Gomera (21 días), las que menos tiempo hacen esperar a sus proveedores, cumpliendo la Ley de Morosidad con holgura al pagar en menos de tres semanas.
Por el contrario, la diputación provincial de Burgos se erige como la peor pagadora, al tardar de media 95 días en hacer frente a las facturas de sus proveedores, seguida del cabildo insular de El Hierro (78 días), el de Tenerife (77 días, de media) y la diputación provincial de A Coruña, que el primer semestre del año ha pagado en una media de 70 días, alejadas de los 30 que establece la Ley de Morosidad.
Gandía (475) el municipio que más tarda en pagar. Fuengirola, el que menos (9 días).
Queremos destacar aquellas localidades que mejor y peor pagan a sus proveedores. Debemos recordar que la administración local es la peor pagadora, ya que se demora de media prácticamente tres meses (88 días) en pagar a sus proveedores autónomos. Además, ésta es el tipo de administración para la que más trabajan los autónomos. Prácticamente triplica lo que establece la Ley de Morosidad y la Directiva Europea de Lucha contra la Morosidad (30 días).
Para ello hemos tomado como referencia los ayuntamientos de los municipios de más de 45.000 habitantes. (Se adjunta al final del documento tabla completa con la evolución de estos municipios).
Pero frente a esos 88 días de media, hay municipios que registran unos datos mucho más altos. Es el caso de ayuntamientos como los de Jaén y Gandia, que se han convertido en los que más tardan en pagar de España, al pagar en 473 días (Jaén) y 475 (Gandia). Es decir, que un autónomo que realiza un trabajo para uno de estos dos ayuntamientos cobrará, de media, casi 16 meses después de presentar la factura. 385 días de media esperan los proveedores en Algeciras, y casi un año en Parla (352 días) y Telde (319 días).
Por el contrario, también hay ayuntamientos que realizan una buena gestión de sus facturas y no sólo cumplen la Ley de Morosidad sino que pagan en menos de tres semanas. Así, la administración local de Fuengirola es la que antes paga a sus proveedores, al hacerlo en 9 días de media, seguida del ayuntamiento de Vigo (19 días), Cáceres y Málaga, ambas con 22 días, de media y 24 días en el caso de los ayuntamientos de Segovia, Hospitalet de Llobregat y Badajoz.
Aquí hay que destacar el esfuerzo hecho este primer semestre por el ayuntamiento del municipio madrileño de Alcorcón, que si bien llevaba unos años situándose como el peor pagador, ha pasado de pagar a sus proveedores de 449 días, de media, a 251 días, que si bien sigue siendo un registro que no se debería permitir, es de valorar la reducción en más de seis meses del tiempo de espera para cobrar las facturas.
Autónomos y pequeñas empresas, los mejores pagadores
La morosidad entre empresas privadas (B2B), de media, se establece en 71 días. Las empresas afincadas en la comunidad autónoma de Navarra son las que antes pagan a sus proveedores con 63 días de demora (cumpliendo prácticamente con los que establece la Ley de Morosidad para empresas privadas, 60 días). 64 días tardan en pagar las empresas País Vasco y 65 las de Asturias y Cantabria.
En el otro extremo, las empresas privadas de Extremadura son las que más tiempo medio de pago tienen con otras empresas, retrasando los pagos en una media de 79 días. Seguidas de las empresas ubicadas en Asturias, Canarias y Cataluña, que tardan una media de 76 días en pagar las facturas emitidas por otras empresas.
Si tenemos en cuenta el tamaño de la empresa podemos afirmar que son los autónomos sin trabajadores y aquellas pequeñas empresas (que tienen hasta 9 trabajadores o de 9 a 50 trabajadores) las que cumplen con un amplio margen con los plazos de pago que establece la Ley de Morosidad. Según va escalando el tamaño de empresa, va empeorando los periodos medios de pago, siendo nuevamente las empresas de más de 1.000 trabajadores, esas mismas que presumen en muchos casos de ser socialmente responsables, las que más tardan en pagar las facturas pendientes (114 días de media).
Los autónomos durante el primer semestre de 2017 han pagado sus deudas con otros autónomos en una media de 40 días de plazo, cumpliendo ampliamente lo que dictamina la Ley de Morosidad (60 días). Las empresas de menos de 9 trabajadores pagan sus facturas en 46 días, conscientes del daño que produce la Morosidad en el resto de pequeñas empresas y autónomos. Las empresas de entre 9 y 50 trabajadores también pagan en tiempo y forma sus facturas con otras pequeñas empresas o autónomos, de media en 51 días.
De 50 a 250 empleados tienen las empresas que de media tardan unos 66 días en pagar las facturas a otras empresas.
Y a partir de aquí, los periodos medios de pago se disparan: las empresas de entre 250 y 1.000 trabajadores y las de más de 1.000, no satisfacen sus deudas con sus proveedores hasta los cuatro meses (110 días de media de espera y 114, respectivamente).
"La Morosidad no tiene nada que ver con el tamaño de la administración, ni de la población, es cuestión de gestores, buenos y malos. Y aunque todas las administraciones han ido reduciendo sus periodos medios de pago con sus proveedores, el esfuerzo no ha sido igual en todas las regiones de España y aun muchos autónomos sufren día a día impagos que les dificultan el seguir trabajando. Es doloroso ver cómo la buena senda de reducción de la morosidad que no hace tantos meses celebrábamos, se ha prácticamente parado, ralentizando la reducción de los tiempo de pagos y, en algunos casos escandalosos, incrementando esa espera en más de un mes", afirma Lorenzo Amor, presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, ATA.