Para Emilio Navarro, " la intención de este grupo de gobierno siempre ha sido la de disminuir, en la medida de lo posible, la presión fiscal de los ciudadanos. Esta nueva bajada se suma a las aprobadas en años anteriores, por lo que suma un descenso del 19% en los tres últimos años. Además, para este año 2018 las ordenanzas fiscales incluyen la congelación del resto de impuestos municipales así como mantener las bonificaciones y exenciones en las principales tasas.
A todo esto hay que sumar las subvenciones de ayudas sociales e individuales que el Ayuntamiento hace unos años puso en funcionamiento como ejemplo de gestión no solo a nivel municipal sino también a nivel insular para pensionistas, desempleados de larga duración y personas con familiares con discapacidad a su cargo para colaborar en sus gastos por vivienda habitual relacionados con el pago del Impuesto sobre Bienes Inmuebles, cuya cuantía a percibir por cada beneficiario será equivalente al 90% de la cuota del recibo del IBI correspondiente a la vivienda habitual.