El acuerdo, firmado por el presidente de Ashotel, Jorge Marichal, y por la directora del Proyecto Salvavidas en Canarias, Rosa Pérez, quiere contribuir a incrementar los espacios cardioprotegidos mediante la instalación de desfibriladores semiautomáticos hoteles y apartamentos miembros de Ashotel. De esta forma, la patronal pone a disposición de sus asociados la posibilidad de crear un plus de seguridad para todos los turistas que nos visitan.
El convenio incluye no solo la venta e instalación de estos aparatos especializados en los establecimientos hoteleros que así lo decidan a un precio ventajoso, sino la formación del personal no sanitario en técnicas de reanimación y primeros auxilios, así como en el uso específico de estos aparatos médicos, de vital importancia para salvar vidas ante posibles episodios de paros cardiacos.
Rosa Pérez explicó que el proyecto "es ambicioso" y por eso quieren llegar a muchas entidades públicas y privadas, pero que se trata de "salvar vidas". Además, informó de que al 90% de las personas que sufre un paro cardiaco, este se produce fuera de instalaciones hospitalarias.
Por su parte, Jorge Marichal, en línea con el planteamiento de Rosa Pérez, dijo que "cuando se trata de salvar vidas, cualquier precio es poco". "Este servicio no solo va dirigido a los clientes de los establecimientos hoteleros, sino también al propio personal que trabaja en ellos", indicó Marichal, quien añadió que de esta forma se contribuye también "a reforzar la imagen de seguridad que tiene nuestro destino".
Ashotel tiene entre sus fines como asociación empresarial promover la difusión de los oportunos métodos de formación e investigación vinculados al sector, así como facilitar servicios de interés común y específico que puedan requerir sus asociados. Con este convenio se contribuye a este fin social.
Proyecto Salvavidas
El Proyecto Salvavidas, representado en Canarias por MundohotelGH, es una iniciativa que pretende concienciar a los no sanitarios de la importancia de tener una vida más saludable, de la necesidad de aprender técnicas de reanimación y primeros auxilios, así como lograr una mayor implantación de desfibriladores semiautomáticos.
Los responsables del Proyecto Salvavidas afirman que la existencia de desfibriladores semiautomáticos para personal no sanitario en lugares públicos, así como la formación en las técnicas básicas de recuperación cardiopulmonar, conseguirían salvar a un elevado porcentaje de las personas que sufren un paro cardiaco. Para lograr este objetivo el desfibrilador debe llegar en los primeros 4 minutos.
Este aparato puede usarlo cualquier persona con un mínimo de formación. En países de nuestro entorno se encuentran presentes en todos los edificios públicos y privados con una afluencia de más de 100 personas al día.