El fenómeno migratorio ha vuelto a poner de relieve el gran abandono, descuido, dejadez, colonialismo...(escojan ustedes el adjetivo) del Gobierno del Estado hacia la nacionalidad canaria (Para los nacionalistas españoles: escribo "nacionalidad canaria" y no "comunidad" porque así consta en nuestro Estatuto de Autonomía refrendado por la Constitución). Ese desprecio (vaya, apareció otro adjetivo) no es nuevo. Aunque suele disimularse en el día a día, suele hacerse notar cada vez que los intereses de esta tierra y los del Gobierno estatal difieren...
No hace muchos años el tema de debate fue la autorización a Repsol para buscar petróleo en aguas canarias. Ahora es el fenómeno de la inmigración. Un asunto que, además de evidenciar el trato despectivo hacia Canarias (por mucho que vengan ministros y líderes de la oposición a hacerse la foto), demuestra la falta de rigor y de planificación del Gobierno del Estado hacia el tema (da igual el color del Gobierno de turno)...
Para empezar: NADIE abandona su tierra y se embarca (nunca mejor dicho) en una aventura que puede costarle la vida por puro gusto. Los migrantes que salen de Africa lo hacen huyendo. Unos del hambre y la miseria. Otros huyen de la guerra. Y pagan un alto precio (y no me refiero a lo que les sacan las mafias) dado que abandonan todo lo conocido, a sus familias, arriesgan su vida (y muchos la pierden) con tal de buscar un futuro mejor en Europa. Esa Europa que durante siglos ha ido a su tierra a saquearla sin compasión...
No se embarcan en pateras o cayucos pensando en quedarse en Canarias, una tierra que ya cuenta con más población de la que puede sostener. Quieren llegar a Europa a buscar trabajo, simplemente. Usan Canarias como puente. Más ahora que vía Mediterráneo la cosa está demasiado complicada...
Sin embargo parece quedar claro que para el Estado Español lo de que "Canarias es Europa" es más una simple frase hecha para quedar bien, que una realidad palpable. La única "solución" que plantean es crear "campamentos de refugiados". Hablan como "gran medida" de habilitar siete mil plazas en las islas. Nada de permitir traslados a la Península, a pesar de que hay Comunidades como el País Vasco, Extremadura, Valencia, Castilla y León o la ciudad de Barcelona que se han ofrecido a cooperar...
Para el Estado Español la única respuesta posible es convertir a Canarias en una nueva Lesbos, en una cárcel para migrantes que impida su acceso a Europa. Tampoco es válido que venga Pablo Casado a mostrar apoyo cuando todos sabemos que de ser él quien presidiera el Gobierno del Estado muy posiblemente su actuación fuera la misma o peor. Eso sí, mucha muestra de "apoyo" por su parte pero ha evitado posicionarse sobre el traslado a la Península de migrantes...
Pero claro, es un tema que da mucho juego político: ahí está Ana Oramas de Coalición Canaria (rama ATI), con su discurso lleno de incoherencias, hablando casi como una independentista cuando no es más que una regionalista más cercana a las tésis de UPN o Foro Asturias. De hecho, es tan "nacionalista" que sus discursos suelen ser aplaudidos por la Derecha fascista de Vox. Pero mientras ellos solo intentan sacar tajada política, el drama humano sigue adelante...
Posiblemente si el drama de Arguineguín (ese lugar tan difícil de pronunciar para el ministro Marlaska) no hubiera trascendido fronteras no habría venido ni él ni los otros ministros que han desfilado por aquí estos días. Lástima que su desfile haya sido simplemente eso: una pasarela...
Canarias no puede convertirse en una nueva Lesbos o Lampedusa. Una frontera ilegal entre Canarias y el continente europeo, como bien señala el Vicepresidente de Canarias Román Rodríguez, para quien "es inconcebible que ni España ni la UE tengan una política migratoria para los territorios frontera, como Canarias".
Añade también el Vicepresidente que "Si el Gobierno de España no coordina la solidaridad entre las CC. AA., no descartamos recurrir a las relaciones bilaterales para gestionar este problema con la ayuda de otras autonomías. Canarias exige derivaciones regladas, transparentes, solidarias y con cupos. No vamos a aceptar campamentos infinitos, no es de recibo, eso es lo que se está haciendo en Lesbos o Lampedusa."
Como ha declarado Luis Campos, de Nueva Canarias: "El Estado ha vuelto a fallar a Canarias. Lamentable" que tengan que ser los territorios del Estado "los que comprendan" la situación que se vive en Canarias frente "a la desidia" del Gobierno de España."
Quizás va siendo hora de que los canarios nos vayamos dando cuenta de que nuestros problemas le son siempre "ajenos" al Gobierno estatal de turno. Pero claro, la mala memoria siempre hace que nos olvidemos...
Angel Rivero García
www.encanarias.wordpress.com
