"La empresa va a reponer el mallado con todas las garantías de seguridad y la voluntad del Cabildo y de los ayuntamientos afectados es que la carretera pueda abrirse cuanto antes", añadió Torres.
Los operarios de Obras Públicas del Cabildo retoman esta semana la limpieza y retirada del material de la vía, interrumpidas por las lluvias, y posteriormente la empresa retirará la estructura dañada, para lo que es necesario tanto maquinaria como personal especializado que se trasladará a Gran Canaria desde Suiza.
Una vez retirada la estructura de acero, que llevará varios días por su envergadura y por la especialización que exige, la empresa comenzará a instalar el nuevo mallado.
El servicio de conservación de carreteras del Cabildo también trabajará en otros puntos de la GC-200 desde El Risco a La Aldea donde se han producido pequeños desprendimientos.