La remodelación no conlleva obras de gran envergadura, pues sólo tendrá una intervención espacial y lineal en la franja central de la Plaza, y en los aparcamientos de la calle Paraguay para darle continuidad visual y paisajística.
Las obras mejorarán el campo de visión diáfano de la Plaza desde la Avenida de Las Américas, en cuya rasante se construirá una plataforma escenario para los eventos lúdicos y festivos, con unos pequeños camerinos laterales.
La superficie de la Plaza se excava para devolverle su antigua horizontalidad plana. Eso permitirá crear dos pequeños graderíos laterales juntos a los parterres existentes para el disfrute de los eventos públicos.
La intervención en la Plaza no afectará a las calles paralelas Haití y Paraguay, que seguirán manteniendo la misma rasante. Se usará piedra de cantería en tonos grises y ocres-tierra semejantes a los usados en la Iglesia y las jardineras. Todo el equipamiento contará con nuevos puntos de iluminación led para dar una nueva visión nocturna al entorno y mejorar la calidez y amabilidad del mismo.
La remodelación salió a concurso con un presupuesto total de 428.000 euros, y se presentaron 16 entidades empresariales. Las obras responden a una sentida demanda vecinal que reclama devolverle a este espacio público la horizontalidad, comodidad y vida social que perdió con la anterior reforma y la construcción de la iglesia.