La Institución grancanaria, responsable del Plan Insular Territorial de Protección Civil de Gran Canaria (PEIN), explica que a raíz de los últimos informes de evaluación de la situación y de los vuelos de reconocimiento desde el aire, así como la simulación espacial del vertido, no existe un peligro inminente de afectación de la costa. Así, se abren las playas nuevamente al baño y a las actividades lúdico deportivas en la zona que este martes se cerró por precaución, desde San Cristóbal, en Las Palmas de Gran Canaria, hasta la Bahía de Gando, en Telde.
El personal de salvamento Proactiva y los voluntarios de Protección Civil han iniciado ya la retirada del vallado y el balizamiento de las calas del municipio.
Por otro lado, se recuerda a la ciudadanía que en el caso de avistamiento de restos del vertido cerca de la costa o de fauna afectada, se debe avisar al CECOES 112. Los posibles restos del vertido no deben manipularse.
Cabe recordar que tras el accidente del ferry en la noche del viernes se derramaron 63.000 litros de combustible, de los que aproximadamente la mitad fueron retirados del mar mediante cisternas. En este momento, la mancha alcanza una longitud de 13 kilómetros.