Este camino es una vía de gran interés tanto a nivel municipal como insular, respecto a la Red de Senderos de Gran Canaria, dado que es la vía de comunicación histórica más importante para conectar la zona de medianías con el Casco de Guía, y que cuenta incluso con señalética oficial del Servicio Técnico de Medio Ambiente. Asimismo, constituye una vía pecuaria tradicional para la trashumancia que han efectuado tradicionalmente los pastores del entorno de Montaña Alta, Bascamao y Alguacilejo.
La consejera insular de Política Territorial y Paisaje, Inés Miranda, señala cómo, "con muy bajo presupuesto, se ha restaurado un camino que permite mejorar la calidad de vida de la población que vive en las inmediaciones, así como de los numerosos senderistas, y la actividad de trashumancia que utiliza este sendero", ha indicado. "Durante más de una década, el camino no ha tenido el mantenimiento necesario, por lo que, a petición del Ayuntamiento de Santa María de Guía, hemos procedido a arreglarlo y los vecinos y vecinas han manifestado su satisfacción por el resultado. Ahora, lo necesario es que lo cuidemos entre todos y todas".
El principal objetivo del proyecto ha sido poner en valor la monumentalidad del paisaje del Camino de Bascamao, a través de una intervención puntual integrada en este territorio, que señala algunos de los acontecimientos paisajísticos más destacados de la orografía de Santa María de Guía.
De hecho, la obra ha supuesto la recuperación de un camino que posee un marcado valor histórico, además de la consecución de una transición sutil entre la carretera que une Montaña Alta con Bascamao y el nuevo mirador que se ha proyectado para este enclave, con el propósito de propiciar un diálogo más intenso de los senderistas y de mejorar la atracción turística del municipio en este ámbito. Ese nuevo mirador podrá ser usado como punto de partida, descanso o llegada de ciclistas, senderistas y de otras actividades relacionadas con la naturaleza y el paisaje.
Así, los trabajos ejecutados han subsanado los desperfectos que presentaba la vía, debido a que uno de sus tramos discurre por una ladera de fuerte pendiente y, como consecuencia de las escorrentías de lluvia, se habían producido desprendimientos y arrastres de tierras, que afectaban al ancho del camino y comprometían su estabilidad, por lo que la zona carecía de las condiciones de seguridad necesarias para sus usuarios. Incluso existía un punto que se encontraba en situación de derrumbe total, lo que había originado la desaparición de su traza original y había obligado al Ayuntamiento de Santa María de Guía a cerrarlo.
Esos problemas ya se han corregido y se logrado recuperar el camino público, mediante el rasanteo y la reposición del trazado original, de acuerdo con el estudio geotécnico que se efectuó con ese fin. Además, se han colocado muros de mampostería con acabado en piedra vista en todas sus caras, de 2,5 a 3 metros de altura, y muretes de 1,10 metros de altura de similares características que contienen la vía por ambos lados.