Así, con esta actuación, se pretende aumentar la oferta de casas de titularidad pública en Gran Canaria, sin consumo de suelo, así como eliminar algunos edificios inacabados y destinados a viviendas que existen en los municipios de la Isla, con lo que, además de mejorar el paisaje, se les dará el uso para el que estaban proyectados y se podrán poner a disposición de las familias que demandan una casa.
Para llevar a cabo esta acción, la Corporación cuenta con un presupuesto de 4 millones de euros, que se destinarán a sufragar la compra del suelo y el valor de la obra inacabada, y a la terminación de los trabajos. "De esta manera, en el Cabildo de Gran Canaria continuamos trabajando con el compromiso de poner más viviendas públicas en el mercado para quienes las demandan y con criterios de sostenibilidad", subrayó María Concepción Monzón, consejera de Arquitectura y Vivienda y vicepresidenta del Consorcio de Viviendas de Gran Canaria.
Las y los interesados en ofertar estos inmuebles deben tener en cuenta que tienen que ubicados en Gran Canaria, contar con un mínimo de cuatro viviendas y un máximo de 20, aunque cabe indicar que, de no existir ofertas que cumplan con ese número máximo, no se tendrá en cuenta este límite.
Además, se tratará de viviendas plurifamiliares en bloque y estar ubicadas en suelo con calificación urbanística para el uso residencial, con licencia urbanística vigente y con autorizaciones sectoriales. Asimismo, no podrán estar incursas en supuestos de infracción urbanística. Su grado de ejecución será de entre un 45% y un 90%, y su plazo de ejecución estipulado para la finalización de las obras no podrá superar los 12 meses.
Por último, hay que reseñar que el precio máximo de referencia se establece en 1.412,30 euros el metro cuadrado útil.