"Estamos en una situación crítica. Debemos demostrar que podemos mejorar", ha asegurado Merkel en declaraciones a la prensa. Y ha mencionado en ese sentido aéreas como la seguridad, el crecimiento económico, el mercado laboral, la agenda digital, las esperanzas y posibilidades para los jóvenes en Europa.
Además, Merkel ha destacado la importancia de proteger mejor las fronteras exteriores de la Unión Europea y de combatir las razones por las que los refugiados de Oriente Medio huyen a Europa.
"Queremos lograr avance concretos (en Bratislava)", h adicho la canciller alemana, quien se reunió este jueves en París con el presidente francés, Francois Hollande, para fijar una "nueva agenda" que cambie el rumbo de la UE en los próximos seis meses y con motivo de la salida del Reino Unido del club comunitario. Marzo de 2017, sostienen, es el límite para pactar el nuevo rumbo de la Unión.
"No es una crisis más. Es una crisis sobre su existencia, sobre sus fundamentos", alertó este jueves Hollande en París en presencia de Angela Merkel.
A su llegada a Bratislava, Hollande ha insistido en que "la Defensa europea es el reto de Europa". El presidente galo ha recalcado que Francia hace el "principal esfuerzo" en materia de Defensa dentro de la UE, pero ha avisado de que su país no puede "estar solo", por lo que ha pedido que el bloque sea capaz de asegurar su propia seguridad.
La idea de poner en marcha una capacidad militar para la Unión Europea ha vuelto a entrar en las discusiones de los líderes, a calor de la decisión de Reino Unido de abandonar en un futuro el bloque, tradicional opositor a la idea, que cuenta con apoyos y detractores entre el resto de países.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, también ha defendido que la UE se vuelque en la seguridad para recuperar la confianza, sin descuidar el crecimiento y la creación de empleo.
El primer ministro de Hungría, el conservador Viktor Orbán, ha sido la nota crítica y discordante. Ha pedido "respeto" a los húngaros y ha exigido a la UE que no recurra a "trucos" legislativos, como el que ha dicho usó para tratar de imponer un sistema obligatorio de reparto de refugiados.
"Pedí al señor presidente que dé el respeto necesario a los húngaros y que en el futuro no aplique trucos legislativos que vulneran la soberanía de las naciones", ha dicho Orbán, que ha convocado a los húngaros a un referéndum el próximo 2 de octubre para decidir si quieren o no aceptar las cuotas de refugiados.