El vicepresidente y consejero de Obras Públicas y Transportes del Gobierno de Canarias, Pablo Rodríguez, informó esta mañana en sede parlamentaria que la Consejería que dirige está desarrollando las obras del proyecto de ampliación del puerto de Playa Blanca, en la isla de Lanzarote, según los plazos establecidos y aseguró: "La obra del puerto de Playa Blanca se está desarrollando con total normalidad, sin perder tiempo. Nos hemos esforzado para que los trabajos evolucionen con la mayor rapidez posible, teniendo en cuenta que el plazo de ejecución es de 48 meses".
El proyecto, que fue adjudicado por un importe de 39,3 millones de euros, se cofinanciará a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) en un 85%, y el 15% restante con cargo a la Comunidad Autónoma. En este sentido, el consejero explicó: "Actualmente ya hemos ejecutado más de 9,9 millones de euros del presupuesto, y el resto de fondos se seguirán invirtiendo hasta 2021, fecha prevista para concluir las obras. No obstante, tenemos de plazo hasta el año 2023 para justificar los fondos europeos, por lo que no existe riesgo alguno de perderlos".
Desarrollo de la obra
El proyecto de ampliación del puerto de Playa Blanca permitirá la ejecución de una dársena exterior con capacidad para dos ferris, como los que operan en la actualidad, y un nuevo dique de 300 metros de longitud que podrá albergar cruceros de tamaño medio, con los que se ampliará la oferta y se contribuirá a la dinamización económica del municipio y de la isla.
Recientemente, ha arribado al puerto de Arrecife el barco que se encargará de fabricar los cajones verticales para desarrollar la segunda alineación del puerto, un trabajo que se llevará a cabo en la propia isla de Lanzarote.
Por otro lado, ya se ha efectuado la canalización del barranco de Punta Limones, de acuerdo con el Consejo Insular de Aguas de Lanzarote. Además, se ha progresado en los trabajos sobre el dique en talud de la primera alineación y se ha continuado con la ampliación de la explanada ganada al mar, así como con la retirada de la escollera del dique actual.
Además, Pablo Rodríguez aseguró que cada mes se realiza un exhaustivo control de los parámetros medioambientales definidos en el Plan de Vigilancia Ambiental y se realiza un seguimiento subacuático del estado de los sebadales.
