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06 Ago

El informe toxicológico descarta que el maquinista tomara drogas o alcohol

Santiago de Compostela / El maquinista del tren que descarriló en Santiago de Compostela el pasado 24 de julio, Francisco José Garzón, no había consumido ni alcohol ni drogas, según el informe del Instituto Nacional de Toxicología que ha recibido este martes el Juzgado de Instrucción número 3 de la capital gallega. Este análisis solo ha encontrado presencia de cafeína, según ha informado en una nota el Tribunal Superior de Justicia de Galicia.

El juez que investiga el peor siniestro ferroviario en España desde 1944, con 79 fallecidos y más de 150 heridos, ha acordado incorporar al procedimiento, una vez que estén finalizados, los informes sobre el accidente realizados por la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios del Ministerio de Fomento, Renfe y Adif.

La nota del TSJ de Galicia explica que aunque estas investigaciones no son elaborados desde el punto del proceso judicial, se considera oportuno su unión al procedimiento para que el juez pueda estudiarlo. El instructor ha recibido ya informes de Renfe y Adif para ser estudiados.
Informe pericial sobre las causas del accidente

El juez Luis Aláez ha acordado la realización de un informa pericial sobre "las causas del accidente, circunstancias y cualquiero otra anomalía, deficiencia o irregularidad en relación al siniestro".

El instructor quiere que esta prueba la realicen tres ingenieros: uno de Caminos, Canales y Puertos; otro Industrial y otro de Telecomunicaciones.

Para ello ha emplazado a los colegios profesionales y escuelas oficiales de Galicia para que propongan cuanto antes los posibles candidatos para realizar este estudio pericial.

La Policía busca el móvil y el iPad del maquinista entre los restos

La Policía Judicial lleva a cabo este martes un nuevo rastreo de los restos de los vagones del tren siniestrado con el apoyo de perros adiestrados en el que se busca el teléfono móvil y el iPad del maquinista.

Estos dispositivos ya se habían buscado en las inspecciones pasadas y, según fuentes próximas a la investigación, la de este martes es una inspección rutinaria, en la que participan perros de rastreo, para llevar a cabo una última revisión "por si pudiera haber quedado algún resto que no se hubiese detectado" hasta el momento.

Con esta última inspección de los restos del tren, almacenados en una nave ubicada en la parroquia de A Escravitude, en el municipio coruñés de Padrón, se pretende confirmar que no queda en los vagones ningún resto u otro objeto. Tras el accidente ya se habían sacado todos los bienes y objetos de valor que, custodiados por la Policía Nacional, se han puesto a disposición de los afectados y familiares para ser retirados.

En el caso de que se localice algún nuevo resto entre los vagones, ya revisados en otras ocasiones, la Policía Judicial remitirá un informe al titular del Juzgado de Instrucción Número 3 de Santiago, Luis Aláez, encargado de la instrucción relacionada con el accidente ferroviario.

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