Tras la inspección, los funcionarios han emitido un dictamen que formula una serie de observaciones sobre la situación del lugar e indica que, hasta que no se adopten medidas por el inminente riesgo para la salud de los trabajadores, se procede a la paralización de los trabajos de manipulación de los cuerpos y la de los hornos de cremación.
El responsable de Universidades de la Federación de enseñanza de CCOO, Santiago Cuesta, ha explicado que la llegada de los funcionarios de Inspección ha tenido lugar mientras los propios sindicatos estaban reunidos para preparar una denuncia sobre la mala situación de salubridad de las dependencias de la Facultad.
CC.OO habla de "grave riesgo para los trabajadores"
Tras la inspección, según CCOO, la Inspección de Trabajo ha decretado la "paralización" de todos los trabajos del personal técnico que suponga la manipulación de "restos cadavéricos" por "grave e inminente riesgo para la seguridad y la salud de los trabajadores".
También han pedido información sobre la empresa contratada por la universidad que se encarga de retirar estos residuos.
Además, de acuerdo con esta misma fuente, decreta la paralización de los trabajos de utilización del horno de cremación "hasta que no se cumpla la normativa de aplicación", insta a adecuar los lugares donde se encuentran los cadáveres a la normativa vigente y a establecer protocolos de trabajo.
Protocolo para la eliminación de restos cadavéricos
El próximo viernes 23 habrá una reunión entre la Inspección y la Universidad Complutense para presentar un protocolo para la eliminación de los restos cadavéricos.
Fuentes del Ministerio de Empleo han confirmado la realización de la inspección y han indicado a Efe que la Inspección de Trabajo comunicará ahora su dictamen a la empresa encargada de manipular los cuerpos y a la autoridad laboral, en este caso la Comunidad de Madrid.
La Universidad Complutense (UCM) deberá ahora seguir este dictamen o, de oponerse al mismo, recurrirlo a la autoridad laboral.