Tras la reunión que ambos han mantenido en la Fiscalía General del Estado, Moix ha presentado una dimisión que Maza no ha tenido "más remedio" que aceptar ya que, ha insistido, su actuación ha sido "correcta" y ajustada a la ley.
Maza lo defiende y señala que "no había motivo para el cese"
Maza ha ido más allá para decir que "no había motivo alguno para el cese" y que "ser propietario de un bien no obliga a comunicarlo".
El fiscal general del Estado ha señalado que ha tratado de convencerlo para que no dimitiera pero no ha sido posible.
Su gestión ha estado marcada por la polémica y los enfrentamientos con otros fiscales por discrepancias en la investigación de algunos asuntos de corrupción como el caso Lezo.
Tras conocerse la existencia de esta empresa, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, le mostró su confianza pero según fueron pasando las horas los miembros del Ejecutivo optaron por el silencio.
Moix aseguró este miércoles que cuando Maza le ofreció la Jefatura de la Fiscalía Anticorrupción no le informó de la participación que tiene en dicha sociedad porque no le vio ninguna relevancia al ser "una herencia, al estar todo declarado y legalizado y no tener ningún tipo de incompatibilidad para el ejercicio de la función".