El Cabildo ha participado tradicionalmente en esta campaña para la conservación del medio ambiente, apagando las luces de algunos de sus inmuebles más significativos y difundiendo la campaña entre su personal y empleados. En esta edición, la apuesta es por un futuro basado en la energía proveniente del sol, del mar y del viento y ya han confirmado su participación más de 200 ciudades y 120 organizaciones españolas.
Además de este gesto, la Corporación insular ha adoptado una serie de compromisos en materia de eficiencia energética y de buenas prácticas ambientales y como entidad coordinadora insular y signataria del Pacto de los Alcaldes, una red europea de autoridades locales y regionales que ha asumido el compromiso voluntario de mejorar la eficiencia energética y utilizar fuentes de energía renovables en sus territorios.
La hora del Planeta empezó en una sola ciudad de un país el 31 de marzo de 2007, cuando 2,2 millones de personas de Sydney apagaron sus luces durante una hora para reclamar acciones contra el cambio climático. En 2011, más de 5.000 ciudades de 135 países apagaron las luces de sus principales monumentos y edificios emblemáticos, enviando así un claro mensaje: los gestos simbólicos pueden generar grandes cambios si se consigue un compromiso global durante todo el año.