Se trata de una pared de 29 metros de largo, que se eleva 70 centímetros sobre la acera, donde antes había tan solo una barandilla ya deteriorada por el paso del tiempo. Se remata con una nueva baranda de 20 centímetros, que hace que la construcción alcance los 90 centímetros reglamentarios.
En el lado que da hacia los locales afectados -situados por debajo del rasante de la acera-, en su cota más alta, el muro alcanza los 2,70 metros de altura. Para su realización, de acuerdo con vecinos y empresarios de la zona, ha sido necesario quitar dos tramos de escaleras y una pequeña jardinera del acceso que va a dar a los locales.
Como recordó el sexto teniente de alcalde y concejal de Infraestructuras, José Alberto Díaz Estébanez, "a punto de cumplirse dos años desde las lluvias del 19-O, Santa Cruz sigue con el importante plan de mejora y actualización de nuestras instalaciones e infraestructuras, que suponen una inversión de más 18 millones de euros, pero que también incluyen obras de pequeño tamaño pero gran importancia como esta".
"Estas actuaciones se desarrollan en total coordinación con vecinos y empresarios, y no tienen por qué estar directamente relacionadas con fenómenos meteorológicos adversos, pero sí mejoran sustancialmente la vida en nuestros barrios", apuntó el edil.
En concreto, la capital sigue inmersa en un proceso que ha conllevado cuatro líneas de trabajo: el Plan de Cooperación con el Cabildo Insular, cofinanciado con el Ayuntamiento, que suma 7,8 millones de euros; las actuaciones del Consejo Insular de Aguas (Cabildo), por valor de 4,4 millones; los trabajos desarrollados por las áreas municipales de Infraestructuras y Servicios Públicos, con 5,04 millones, y las acciones concretas del área municipal de Deportes, por 900.000 euros.