El concejal de Infraestructuras, Narciso Pérez, explicó que las obras consistirán, fundamentalmente, en adecuación y remozamiento. En cuanto al exterior se prevé el pintado y reparación de las fachadas, así como reparación de las puertas de madera de acceso y eliminación de las actuales barreras arquitectónicas que impiden que el interior del inmueble sea accesible. "Una de las principales actuaciones—subrayó el edil— será la rehabilitación de todas las ventanas, recuperando sus antiguos vidrios de color que aparecen en el diseño original del Kiosco". En cuanto al interior, se renovará todo el espacio, llevando a cabo labores de saneamiento de la estructura, eliminación de divisiones interiores, dotación de nuevo pavimento y renovación integral de todas las instalaciones.
La definición del espacio interior permitirá comenzar, de forma inmediata, con el expediente de licitación para poder adjudicar la cafetería de este kiosco en los próximos meses. El acalde Francisco Linares, insistió en que "debe ser un objetivo prioritario y además compartido por todos los grupos políticos, poner en funcionamiento este emblemático lugar lo antes posible", confiando en que, tras las citadas obras de rehabilitación y mejora, se pueda disfrutar de la cafetería antes de las próximas navidades".
De hecho, el propio Ayuntamiento se plantea acometer la rehabilitación de la pintura y carpintería del resto del Kiosco en una segunda fase que se materializará a lo largo del próximo año, "de esta forma se facilita que el proceso de la adjudicación de la cafetería sea más rápido". Esta primera fase, supondrá una inversión de 53.000 que afrontará el Consistorio villero con recursos propios.
En los pliegos técnicos que regirán la licitación de la cafetería se recogerá que la misma deberá estar abierta todos los días de la semana, definiendo incluso un mobiliario acorde al singular espacio en el que se encuentra.
