La reutilización permite conservar las aguas dulces naturales para otros usos y no en el sistema de riego, algo especialmente importante en los lugares en los que esta es un bien escaso, como es el caso de Arona y de la Comarca Sur de Tenerife.
En una primera fase, esta agua se utilizará en el parque de La Trujilla, que se encuentra en estos momentos en plenas obras, y en las zonas ajardinadas próximas al barranco El Lere.
La previsión es ir extendiendo este sistema al conjunto del municipio en diferentes etapas.
Las instalaciones de Cabo Blanco tienen una capacidad diaria de depuración de en torno a 200 metros cúbicos de agua, de los que unos 150 serán utilizados en el citado parque, en la zona verde anexa al barranco y en el baldeo de las calles.
La puesta en marcha de este método de reutilización, junto con la instalación de un sistema de telecontrol de la estación depuradora, ha supuesto una inversión de algo menos de 42.000 euros.
Mena: "La apuesta por la sostenibilidad es una realidad"
El alcalde de Arona, José Julián Mena, ha explicado que "la apuesta por la sostenibilidad es una realidad, tal y como pone de manifiesto esta obra, que nos permite sacarle el máximo rendimiento a la estación depuradora, ahorrar el agua potable para otros usos y evitar vertidos". Mena ha precisado, además, que "nuestra intención es extender este sistema, en todo lo que podamos y en distintas fases, a todos los núcleos de Arona".
Por su parte, el concejal del área de Obras del Ayuntamiento, José Luis Gómez, ha explicado que la cercanía de la depuradora de la calle Orilla "permite que, con muy poca inversión, los vecinos de Cabo Blanco dispongan de un sistema de riego y baldeo con agua reutilizada de la máxima calidad, ahorrando en el uso de agua dulce, que podrá ir destinada al consumo".