Los trece centros en los que se actúa son el colegio de Aguamansa; Santo Tomás de Aquino; Manuel de Falla; Benijos; La Florida; San Agustín; La Luz; San Antonio; Santa Teresa de Jesús; Domínguez Alfonso; Infanta Elena; La Concepción y Ramón y Cajal.
Felipe David Benítez, edil delegado de Servicios Generales, detalla que el Ayuntamiento valora las principales demandas de cada colegio, y ofrece también otras actuaciones planteadas por los propios técnicos municipales, redundando todas en una mayor funcionalidad y modernización de las instalaciones. Subraya que "se aprovecha siempre la fecha estival aprovechando que no hay clases y para afectar lo menos posible a los usuarios de cada centro". Estas actuaciones se han adjudicado a una decena de empresas locales, que deberán cumplir en operatividad y plazos, para que el curso escolar comience en septiembre con total normalidad y sin las típicas molestias que genera cualquier obra.
El alcalde Francisco Linares señala que desde el Ayuntamiento se tiene especial 'mimo' al área de Educación, por lo que a través de distintas vías se le destina una importante inversión, tanto para las necesarias obras que permitan contar con un centro práctico, funcional y remozado como para ayudar a los alumnos y Ampas y el desarrollo de programas, actividades y eventos. Así, desde hace muchos años se cuenta anualmente con un proyecto educativo importante, que es todo un ejemplo en el ámbito insular y regional.
Linares incidió en que se mantiene todo el año contacto directo con la comunidad educativa para atender sus principales demandas, valorar proyectos e intervenir de interlocutores ante otras administraciones públicas cuando es necesario para solicitar apoyo para cualquier proyecto o intervención positiva para el centro. "El apoyo de la institución local es fundamental", aseveró.