Sin embargo, desde estas siglas se reconoce que el 2017 no ha cumplido con todas las expectativas. El profesorado de Secundaria sigue esperando el retorno a las 18 horas lectivas que asumió durante la crisis sin que aún haya visos de cambio en este sentido. La ratio alumno-profesor continúa siendo en Canarias un agravio comparativo respecto a Península y, subraya Crespo, "lograr un engranaje coherente que garantice la estabilidad del profesorado interino resulta aún un reto más que un logro". También se ve fundamental continuar avanzando en la implementación de medidas de atención a la diversidad.
En el ámbito nacional, ANPE entiende necesario ver cumplimentado el pacto educativo para obtener unos mínimos comunes consensuados desde el profesorado sin estar "al albor de las voluntades políticas", alerta el presidente. En la circunscripción regional, el sindicato aplaude el camino emprendido este año para la atención a la diversidad; si bien asume que "queda mucho para lograr un sistema equilibrado y por eso el profesorado se queda muchas veces sin herramientas". Pero, sobre todo, se destaca la necesidad de mejora del reconocimiento social de la figura del profesorado. En cuanto a la relación familia-tutor, Crespo apunta
que "estamos para ayudar, mejorar y educar y para eso debemos contar con el profesorado, la familia y la propia administración; todos a una es como vamos a mejorar".
Asimismo, el sindicato recuerda que el motor de este curso 2017-2018 llegará tras la celebración de sus consejos sindicales, cuando todos los afiliados debatan y destaquen las necesidades educativas más imperiosas presentes en sus aulas y sobre las que ya trabajan los representantes sindicales de ANPE Canarias.
