En su visita de la semana pasada a la isla, la consejera Manuela Armas ya había adelantado que los centros precisaban un tiempo "para formalizar diversas actuaciones de cara a asegurar una vuelta a clase con todas las garantías de seguridad", por lo que se barajó el 13 de octubre para retomar la actividad. La fecha de referencia se condicionó a que se dieran las condiciones óptimas para dicho inicio, ya que, de lo contrario, el departamento educativo mantendría la suspensión.
"Para una vuelta segura es preciso ultimar algunas cuestiones vinculadas a la seguridad, como el Plan que combina la prevención de la salud ante el COVID-19 con las actuaciones a realizar frente a las emisiones de la actividad volcánica, así como las acciones de revisión de las instalaciones educativas y los planes de autoprotección de los centros; en las que, tanto las direcciones de los centros educativos como el equipo de la Consejería seguimos trabajando ", precisó la responsable del área.
La titular del departamento ha explicado que la Consejería está culminando la elaboración del mencionado Plan de Actuación Escolar ante las emisiones de la actividad volcánica, en colaboración con las Direcciones Generales de Seguridad y Emergencias y Salud Pública y la Consejería de Transición Ecológica. Además, en esta línea, la Consejería de Sanidad ha enviado unas 29.000 mascarillas FFP2 y alrededor de 5.500 gafas de protección con destino a los centros educativos.
Además de determinar la reubicación al alumnado y profesorado de los centros directamente afectados por la erupción volcánica, desde la suspensión de las clases, el 19 de septiembre, la Consejería ha trabajado en la reorganización de las rutas del transporte escolar para atender al alumnado desplazado, en el refuerzo de las actuaciones de limpieza de cubiertas, tejados y el interior de las instalaciones educativas, en la contratación de auxiliares de servicios complementarios para los comedores escolares, así como en una Asistencia técnica para la continua revisión del estado de las infraestructuras educativas y actualización de los planes de autoprotección de los centros, entre otras acciones.
Armas destacó en la visita de la semana pasada a La Palma la apuesta de la Consejería por la presencialidad de las clases, ya que, según indicó, "las niñas y niños encuentran en los colegios un lugar seguro, alejado de las situaciones que viven sus familias, en los que se agasaja al alumnado".
En este sentido, la Consejería impulsa diversas actuaciones formativas con el personal de los Equipos de Orientación Educativa y Psicopedagógicos (EOEP) de las zonas afectadas por el volcán, a fin de atender aspectos vinculados con la educación emocional y la gestión de las posibles alteraciones del estado de ánimo de alumnado y profesorado, derivadas de la situación vivida.
Distribución del alumnado
El alumnado de los CEIP Los Campitos y Todoque (arrasados por la lava) y María Milagros Acosta, en situación de riesgo, se trasladará de forma temporal al antiguo Centro de Educación Especial (CEE) Princesa Acerina, en Los Llanos de Aridane, inmueble cedido por el Cabildo insular. El alumnado de Jedey se reubicará en el CEIP Adamancasis y el de las Manchas de Abajo en el CEIP El Roque. Se respetarán los grupos, es decir, se mantendrá el reparto original del alumnado y con su tutor o tutora.
Por la proximidad de la colada volcánica, preocupa la situación del Centro de Educación Infantil y Primaria (CEIP) La Laguna, que cuenta con nueve unidades y 160 alumnos y alumnas. En consecuencia, su alumnado y profesorado se distribuirá por etapas educativas entre la Escuela Oficial de Idiomas de Los Llanos de Aridane y las instalaciones de la Asociación de Vecinos "Retamar", cedidas temporalmente por el ayuntamiento para dicho uso.
El miércoles, a las 10:00 horas, se celebrará un nuevo encuentro entre la consejera y las direcciones de estos centros docentes para conocer cómo avanzan en la puesta a punto de las instalaciones educativas.
