Durante el acto, Cabrera manifestó que se trata de una distinción que recibe en nombre toda la sociedad canaria, y en especial, la de La Palma, al tiempo que puso en valor el trabajo realizado por la comunidad educativa de la Isla Bonita, y también desde la Consejería para afrontar la situación derivada de la erupción.
En este sentido, destacó las medidas implementadas por el Departamento para garantizar la continuidad de la actividad lectiva en la isla, entre las que se encuentra la reubicación del alumnado, la creación y puesta en marcha de las nuevas rutas de transporte para el mismo, la habilitación de comedores para atenderlo, y el diseño e implantación del Plan de actuación escolar ante las emisiones de la actividad volcánica.
El director general se refirió también a otra acciones desarrolladas desde la Consejería para gestionar la crisis volcánica en la isla, como la contratación de profesorado de apoyo, la distribución de dispositivos electrónicos y mejora de la conectividad, y, de forma particular, remarcó las actuaciones llevadas a cabo en materia de educación emocional con la comunidad educativa palmera, a la que dio especial importancia en el marco del apoyo brindado desde la administración a las personas afectadas.