La organización sindical advierte de que este problema no es nuevo, pero que durante este curso se han multiplicado las quejas por parte de los equipos directivos, que insisten en las complicaciones que se viven en los centros educativos por la falta de estos trabajadores. La creciente burocratización de la enseñanza -subraya ANPE- ha agudizado esta situación en los últimos años, empeorando las condiciones laborales de los docentes y deteriorando la calidad de la enseñanza.
ANPE considera fundamental la labor de la figura del auxiliar administrativo en los centros educativos, ya que ayuda a aligerar el trabajo que deben realizar las secretarías de los centros y los equipos directivos. Además, los auxiliares administrativos contribuyen al correcto funcionamiento de las solicitudes de transporte escolar, el servicio de comedor o ayudas de otro tipo. Sin embargo, en la actualidad, explica el sindicato, los auxiliares deben compartir varios destinos, de forma que muchos centros solo disponen de un trabajador un número reducido de horas a la semana.
Para intentar solventar esta situación, ANPE ha registrado ya una solicitud urgente dirigida a la Consejería de Educación en la que reclama que se revisen los criterios para asignar estos profesionales a los centros y se aumente la dotación de personal administrativo, de forma que los centros educativos puedan atender adecuadamente todas sus obligaciones.
Por otro lado, el sindicato lamenta que en los últimos años la proliferación de leyes orgánicas de Educación en España ha provocado una inestabilidad normativa y ha incrementado los procedimientos, acciones, entornos organizativos y trámites que debe realizar el profesorado.
ANPE ha manifestado reiteradamente que el peso desmedido de estas tareas en el conjunto de las actividades que se realizan en los centros educativos, su relativa eficiencia y su escasa estabilidad en el tiempo producen una excesiva burocratización de la enseñanza. En esta línea, el curso pasado recopiló una extensa batería de propuestas concretas a través de sus afiliados para simplificar estas tareas, pero, aunque ese documento fue presentado en mesas de negociación, las medidas no han sido aplicadas.
Igualmente, ya en 2018 el Consejo Escolar de Canarias se hizo eco de este problema y emitió un informe sobre el lastre que suponían las tareas burocráticas para la enseñanza. Sin embargo, las distintas administraciones han hecho oídos sordos a la batería de propuestas incluidas en este estudio para promover la necesaria simplificación administrativa del sistema educativo en las Islas.