Ante este dato, Antonio Sosa ha querido reconocer "la sensibilidad y la implicación de los ciudadanos de Arona con esta iniciativa", invitando a vecinos y vecinas a continuar contribuyendo a esta causa durante el verano. El edil también resaltó la labor realizada por los colegios de Buzanada, Las Rosas y Las Galletas, que han recogido tapas durante todo el curso escolar, hasta ser retiradas por los operarios de Medio Ambiente.
Esta iniciativa es una realidad gracias a un convenio con la empresa Martínez Cano, que consiste en recopilar tapones de plástico para cambiar su valor por tratamientos médicos para niños y niñas de la isla de Tenerife, afectados por alguna enfermedad.
La asociación Iraitza es un colectivo sin ánimo de lucro nacida en Gáldar en enero de 2013, a partir de la implicación ciudadana para ayudar a una familia canaria que precisó una serie de recursos para su hija Iraitza, familia que posteriormente decidió poner en marcha un amplio proyecto de cooperación y solidaridad para apoyar a todas aquellas otras familias que lo necesitaran en todo el ámbito de Canarias.
La asociación tiene como objetivo prioritario la recogida de tapones plásticos, que logran convertir en ayudas técnicas y en tratamientos médicos necesarios para las personas que lo demanden a la asociación.
Arona ha sido el primer municipio de Canarias en habilitar un espacio propio para esta iniciativa en Ecopuntos Móviles, con el objetivo, según explica Antonio Sosa, de "contribuir a la importante labor que se lleva a cabo desde este colectivo, que supone un valioso apoyo a muchas familias canarias, entendiendo que es un deber de las administraciones implicarse en iniciativas ciudadanas que redunden en beneficio de la comunidad".