Andreu ha tomado esta decisión después de que la Fiscalía Anticorrupción le enviara un informe en el que apreciaba indicios de delito societario y de apropiación indebida en los hechos denunciados por el FROB, el principal accionista de Bankia, a raíz de un informe elaborado por este grupo, que subrayaba que estas tarjetas no tienen soporte contractual ni consta decisión al respecto por parte de los órganos de gobierno.
En total 83 personas -64 miembros del consejo de administración y de la comisión de control y 19 consejeros ejecutivos y directivos- se beneficiaron de estas tarjetas, gestionadas directamente por Sánchez Barcoj, ex director general de Caja Madrid. Entre los gastos realizados, tres millones de euros en restaurantes y 1,5 millones en desplazamientos y viajes.
Los gastos de Sánchez Barcoj, Blesa y Rato
El juez escuchará en primer lugar a Ildefonso Sánchez Barcoj; después será el turno de Miguel Blesa y cerrará las declaraciones el expresidente de Bankia Rodrigo Rato. Los tres tendrán que comparecer acompañados de abogados a partir de las 15.00 hora peninsular del próximo día 16 de octubre.
Según los documentos que tiene el magistrado de la Audiencia Nacional, con esas tarjetas Sánchez Barcoj cargó a Caja Madrid 484.200 euros; en el caso de Miguel Blesa, la factura asciende a 436.700 euros; mientras que los gastos de Rodrigo Rato asumidos por la antigua caja fueron de 44.200 euros.
Rato y Sánchez Barcoj también facturaron gastos con estas tarjetas a Bankia: 54.800 y 90.900 euros, respectivamente, cantidades que ya han sido devueltas por los dos a la entidad.
Goirigolzarri: "Respeto y colaboración con la Justicia"
El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, se ha referido este miércoles a las imputaciones sobre las que ha mostrado su "respeto más absoluto a las decisiones que tenga la Justicia y que tome el juez".
"Nosotros lo que tenemos que hacer es siempre colaborar con la Justicia y, en este caso muy concreto, colaborar como siempre hemos colaborado con el juez", ha destacado Gorigolzarri en declaraciones a los medios en Santiago de Compostela.
El directivo ha explicado que, desde su llegada, se ha definido un proceso para "analizar posibles prácticas que aparentemente no respondieran a la ortodoxia bancaria", fruto del cual ha resultado la detección de estas tarjetas en este ejercicio, de las que cuatro corresponden al "tiempo de Bankia" y el resto, "al tiempo de Caja Madrid".
Ha agregado, además, que, al tener conocimiento de esta circunstancia, se dirigieron a las cuatro personas "a las que nos podíamos dirigir para decirles que devolvieran el dinero" y, paralelamente, pusieron el caso en conocimiento del FROB.
