Pero es que esta celebración presenta una escenificación con otro coste inmaterial pero no menos importante, el de los recursos humanos, que son ocupados en el ensayo y posterior ceremonia, que detraen de forma efectiva componentes del cuerpo de sus funciones policiales habituales, todo ello en un contexto de carencia de recursos humanos que se traduce, por ejemplo, en una ola de robos que asola numerosas localidades, entre las que destacan Tacoronte en el norte y el municipio de Arona en el Sur de la isla.
Otro tema es el de los destinatarios de las recompensas y las medallas impartidas en la citada celebración, puesto que la mayoría son otorgadas a personal que ocupa puestos burocráticos o a mandos que se atribuyen resoluciones y servicios solventados en numerosas ocasiones por personal destinado en destinos operativos, es decir, a pie de calle. Así, desde AUGC nos vemos obligado a denunciar el caso de un guardia civil de la provincia que tras rescatar al conductor de un vehículo cuando se encontraba de servicio, exponiendo seriamente su integridad física, le ha sido denegada la concesión de una medalla que sí otorgaron a sus mandos directos por el mismo servicio. Los hechos se remontan a diciembre de 2013 cuando la zona sur de la isla de Tenerife se vio sorprendida por fuertes lluvias. Se da el caso de que por los mismos hechos le fue concedida una mellada a la Orden del Mérito de la Guardia Civil Cruz con distintivo rojo, a un compañero que rescató a una acompañante del vehículo y al guardia civil que lo acompañaba una mellada del tipo Cruz con distintivo blanco, creadas ambas inicialmente con la finalidad de premiar las acciones o conductas de extraordinario relieve que redunden en el prestigio del Cuerpo de la Guardia Civil e interés de la Patria.
Ante lo que el guardia civil afectado creyó ser una decisión arbitraria e injusta optó por recurrir para solicitar la equiparación a su compañero al haber realizado una igual acción, en la que concurrieron las mismas situaciones de riesgo personal para ambos agentes, resultando finalmente denegadas su pretensión de reconocimiento que se saldó finalmente con la anulación al guardia civil recurrente de la primera medalla concedida, mientras se mantenía para el compañero y los mandos.
AUGC Tenerife denuncia públicamente estos comportamientos y los agravios comparativos que sufren los guardias civiles pues esta resolución denota una vez más que las medallas se reparten a los de siempre, mientras los agentes que prestan servicios operativos de verdad, a pie de calle, son los grandes olvidados, a pesar de ser quienes realmente hacen con su sacrificio que el prestigio de la Guardia Civil se vea reforzado. Situación que se corrobora tras tenerse conocimiento mediante orden publicada en el BOE del 6 de mayo nada menos que la concesión de un total de 8 medallas a la Gran Cruz del Mérito de la Guardia Civil, tres de ellas a Generales de los Ejércitos, y cuatro a Generales de la Guardia Civil, entre ellos a los reciente nombrados con la responsabilidad de ejercer el Mando de Operaciones, quién entre otros cometidos tiene el de implantar los turnos con cadencias fijas en la Guardia Civil, algo hasta la fecha no realizado a pesar de ser de obligado cumplimiento por la propia Orden General de jornada laboral y horarios, irregularidad que desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles ha denunciado ante la Fiscalía.
AUGC constituye una organización conformada por guardias civiles concienciados de que el futuro de la Guardia Civil pasa por un cambio organizativo en el despliegue territorial que modernice el funcionamiento policial del Cuerpo, un justo reparto de la productividad y también, ¿por qué no? de las medallas.
AUGC nació para cambiar la Guardia Civil, para que los guardias civiles dejen de ser ciudadanos de segunda y se conviertan en ciudadanos uniformados con la progresiva extensión de derechos, tan solo limitados estos en el estricto ejercicio de nuestras funciones. Siendo por tanto sujetos de pleno derecho en las estructuras normativa del Estado.
AUGC cuenta con más de 30.000 afiliados, AUGC es la decana de las asociaciones profesionales y la mayoritaria en el Consejo de la Guardia Civil. Cuenta con representación en todo el territorio español, en cada una de las unidades y especialidades del Cuerpo y viene liderando el movimiento asociativo desde la llegada de la democracia, cuando nació como un sindicato clandestino. Su lucha por la democratización y la desmilitarización de la institución le valió en 2010 el Premio Nacional de Derechos Humanos que concede la Asociación Pro Derechos Humanos de España (apdhe).