UNICEF está aumentando las tareas de prevención en las escuelas de las tres zonas sanitarias afectadas. Para ello se están instalando unidades de lavado de manos en 277 escuelas y se está dando apoyo a actividades de sensibilización para más de 13.000 niños de Mbandaka, Bikoro e Iboko.
A la organización le preocupa especialmente el bienestar de los niños con parientes que han contraído la enfermedad. "Los niños cuyos padres o cuidadores mueren a causa del ébola, o los que viven aislados porque tuvieron contacto con una persona infectada, necesitan apoyo psicosocial para ayudarles a superarlo", asegura Rotigliano.
Los brotes de ébola anteriores han demostrado la necesidad de que los trabajadores sociales sean capaces de identificar y asistir a los niños vulnerables. Hay 22 agentes psicosociales, formados por UNICEF y sus aliados, proporcionando asistencia a familias afectadas por el brote. Además, UNICEF está apoyando con alimentos y kits para sus hogares a 23 niños –y sus familias- con parientes infectados por ébola.
UNICEF continúa trabajando estrechamente con las comunidades para promover hábitos que prevengan la transmisión de la enfermedad, como enterramientos seguros y lavado de manos. La organización está también hablando con los líderes comunitarios, realizando labores de divulgación y dando apoyo a las campañas de sensibilización puerta por puerta. En Mdandaka se ha identificado a 706 personas que están trabajando para prevenir el ébola a través de la comunicación y de la implicación de las propias comunidades.
Acerca de UNICEF
UNICEF promueve los derechos y el bienestar de todos los niños y niñas en todo lo que hacemos. Junto a nuestros aliados, trabajamos en 190 países y territorios para transformar este compromiso en acciones prácticas, centrando especialmente nuestros esfuerzos en llegar a los niños más vulnerables y excluidos para el beneficio de todos los niños, en todas partes.