La confección del repostero se ha llevado a cabo en dos fases: La primera ha consistido en el diseño y entrega del cartón, que es el boceto que se dibuja, a modo de plantilla antes de efectuar la versión definitiva del repostero.
Tal y como estableció el Gobierno, las proporciones de los elementos en la composición general se han establecido teniendo en cuenta su percepción desde diferentes puntos de vista (puerta de acceso y escalera)
El repostero incluye la combinación de dos escudos: El constitucional de España y el de Tenerife. Las cenefas, que son las franjas que bordean el marco, recrean una selección de plantas autóctonas de Canarias, como el cactus.
La segunda fase ha sido la fabricación e instalación del repostero en las dependencias de la Subdelegación del Gobierno de Tenerife. Tal y como se solicitaba en el concurso público, dicha fabricación se ha llevado a cabo con telas y materiales de primera calidad. Por otra parte, el repostero es una obra de artesanía. Tanto los bordados de aplicación como el proceso de costura y el bordado se han realizado de manera completamente manual.
El edificio donde se encuentra ubicado el repostero es un bien de interés público (BIC) en la categoría de conjunto histórico con la denominación de 'El Barrio de los Hoteles -Pino de Oro´. También aparece inventariado en el catálogo del Plan General de Ordenación de Santa Cruz de Tenerife con grado de protección ambiental.
La Real Fábrica de Tapices es la Real manufactura más antigua que se conserva en España. Con 300 años de tradición, actualmente es líder en el campo de la restauración textil, donde se aplican las tecnologías más punteras en el marco de una economía sostenible. Cumple una función esencial en la conservación del patrimonio textil español, al mantener los procesos de fabricación tradicional, en los que se utilizan materiales de alta calidad.