Melchior destaca que a largo de sus 100 años el Cabildo de Tenerife sólo ha entregado 47 medallas de oro y 13 títulos de Hijo Adoptivo, la más alta distinción de la Isla a las personas que no han nacido en Tenerife, "lo que habla de las especiales cualidades de las entidades y personas que son reconocidas hoy".
El presidente del Cabildo señala "el espíritu independiente y crítico de Wladimiro, que le ha hecho siempre destacar como un hombre especial y singular, defendiendo siempre sus criterios con libertad. Su implicación y compromiso han estado muy por encima de lo que exigía el normal desempeño de su cargo, incentivado siempre por su infatigable deseo de mejorar las cosas. Ello no hubiese sido posible sin la complicidad y apoyo de su familia, su esposa Ángela y sus hijos Iván y María, verdaderos pilares donde Wladimiro se ha sostenido a lo largo de estos años".
Desde su puesto de consejero de Medio Ambiente, Wladimiro Rodríguez Brito promovió la adquisición de fincas para fines ambientales colectivos –gracias a su labor municipios como Buenavista del Norte pueden contar hoy en día con montes públicos-, la defensa de los espacios naturales protegidos, el impulso del reciclaje y la mejor dotación de medios técnicos y humanos para la lucha contra los incendios forestales, entre otras actuaciones.
La Congregación Salesiana ha destacado a lo largo de casi 70 años en el marco de la enseñanza y formación de la sociedad tinerfeña, faceta que ha reforzado con el apoyo a la promoción de las clases populares y su incansable y desinteresado trabajo a favor de los más jóvenes.
Los primeros miembros de la Congregación Salesiana llegaron a Tenerife hace casi 70 años para desarrollar la ingente y meritoria labor educativa que han desplegado por todo el mundo bajo la inspiración de su fundador, San Juan Bosco (Don Bosco). La primera congregación salesiana llegó al centro de enseñanza de Santa Cruz de Tenerife en 1945, mientras que el de La Orotava comenzó a funcionar en 1948.
Cajasiete Caja Rural, Sociedad Cooperativa de Crédito se constituyó oficialmente el 6 de mayo de 1962 bajo el nombre de Caja Rural Provincial de Santa Cruz de Tenerife bajo la presidencia de Pedro Modesto Campos Rodríguez. Cajasiete Caja Rural surgió después de una labor de meses de un grupo de cooperativistas agrarios a fin de establecer un banco que fuese un instrumento al servicio de las cooperativas y de los agricultores, atendiendo a sus necesidades financieras y posibilitando el desarrollo de sus actividades.
Durante sus 50 años de existencia, Cajasiete Caja Rural ha alcanzado objetivos y cifras muy importantes. En este ejercicio de 2012, cuenta con 84 oficinas sucursales y más de 40.000 socios y su volumen de negocio sigue creciendo cada año. La actual crisis económica plantea, indudablemente, nuevos retos, pero Cajasiete Caja Rural confía en su capacidad y espera ampliar sus cifras