En la reunión que han mantenido, Ignacio González ha agradecido a Javier Rodríguez su dedicación y su trabajo al frente de la Consejería de Sanidad, así como la "magnífica gestión" llevada a cabo desde que fue nombrado para el cargo, el pasado 27 de enero.
Javier Maldonado tomará posesión de su cargo como consejero este viernes, al que llega procedente de la viceconsejería de Asistencia Sanitaria, antes del acto oficial que celebra el Gobierno regional para celebrar el Día de la Constitución.
Cirujano de profesión, Maldonado se incorporó al Gobierno regional procedente del Hospital Ramón y Cajal, donde ocupó el cargo de gerente, y previamente había sido director médico del Hospital La Paz.
Polémica gestión de la crisis del ébola
Esta destitución se produce solo un día después de que Javier Rodríguez defendiera su gestión del ébola al decir que si lo hubiese hecho "mal", la auxiliar de enfermería Teresa Romero "no estaría hablando".
Oposición y profesionales sanitarios habían exigido el cese o dimisión de Rodríguez en las últimas semanas por su gestión del caso y las palabras del consejero en las que acusó a la enferma de ébola de haber mentido y ocultado información sobre su estado de salud, unas declaraciones por las que pidió perdón, y por su respuesta a las críticas de los sindicatos sobre la escasa formación que habían recibido para hacer frente al virus, cuando dijo que para ponerse y quitarse un traje "no hace falta un máster".
Precisamente este jueves, el portavoz del Gobierno de la Comunidad de Madrid, Salvador Victoria, ha lamentado en nombre del Ejecutivo regional las "chocantes" declaraciones del ya destituido consejero. Tras la reunión del Consejo de Gobierno, Victoria ha señalado tras preguntas de los periodistas que esas declaraciones le parecen "tan chocantes" como a la mayoría de las personas que las han escuchado.
"Cualquier declaración chocante no es algo positivo, eso es lógico", ha proseguido Victoria, que ha indicado que ese asunto no se ha tratado en el Consejo de Gobierno y que él no es nadie para pedir explicaciones al consejero.
El portavoz del Gobierno de la Comunidad de Madrid ha insistido en que el Gobierno regional lamenta las palabras de Rodríguez, que según ha reconocido le causaron "extrañeza".
Consejero de Sanidad desde enero de 2014
Recomponer las "maltrechas" relaciones con los profesionales era el gran objetivo de Javier Rodríguez cuando el pasado 28 de enero tomó posesión como consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, pero solo meses después la crisis del ébola ha forzado su salida entre una agria polémica con los sanitarios.
Poco después de su entrada en la Consejería, Rodríguez se vio obligado este verano a anunciar la apertura de una investigación para esclarecer la posible cesión de datos de pacientes por parte del Hospital de Fuenlabrada a una clínica privada. Días después, aceptó la dimisión del gerente del hospital por "presuntas" irregularidades administrativas en la cesión de datos y cesó a otros dos cargos del centro.
Pero ha sido el primer contagio de ébola conocido fuera de África el que ha desembocado en el cese, en meses, del sucesor de Javier Fernández-Lasquetty, a su vez dimitido tras renunciar el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, a llevar adelante el plan de privatización de la gestión de 6 hospitales y 27 centros de salud.
En su estreno como consejero, Rodríguez (Madrid, 1943) se comprometió con los profesionales en mantener un sistema sanitario "público, de la máxima calidad y universal", pero en las últimas semanas no ha hecho más que coleccionar peticiones de cese o dimisión e incluso críticas desde su propio partido a declaraciones "fuera de lugar" sobre el contagio de ébola.
Porque la insistencia en que, tras el contagio, Teresa Romero pudo haber ocultado información sobre su estado de salud colocó a Rodríguez en el ojo del huracán en una crisis que las últimas declaraciones del consejero no han hecho más que reavivar.
Otras reacciones desafortunadas, como afirmar que llegó "comido" a la política y que tiene la vida "resuelta", le granjearon en los últimos días numerosas críticas de partidos, sindicatos y profesionales sanitarios con los que buscaba recomponer relaciones.
La gota que ha colmado el vaso fueron las declaraciones de este miércoles en las que hizo su última defensa sobre la gestión del ébola.
Rodríguez es además diputado en la Asamblea de Madrid, miembro de la Junta del Partido Popular de Madrid y también de la Comisión Regional y Nacional del PP.