Dicho esto, hay que expresar una serie de irregularidades que han rodeado a la que entendemos como una apertura precipitada ya que no ofrece todas las garantías legales, en el sentido que no ha sido correctamente recepcionada la obra, ni está lista para ser entregada. La climatizadora encargada del flujo del aire de las dependencias no funciona y carece de equipamiento tan importante como monitores y respiradores, hecho que en sí mismo viene a condicionar la imposibilidad de asistir a los pacientes con determinado tipo de requerimientos. Igualmente el sistema automático de remisión de muestras para laboratorio se encuentra inoperativo, asegura Intersindical.
En cuanto a la dotación de personal prevista, la ficha financiera existente contempla 3 Facultativos, 15 Enfermeros y 10 Auxiliares de Enfermería. "Además de ser claramente insuficiente en el área asistencial, se han obviado otras categorías fundamentales como los Técnicos de Atención al Usuario y los Operarios de Limpieza necesarios, tratándose la atención sanitaria en su conjunto de una labor de equipo donde están implicados otros profesionales y otros Servicios como Cocina, Lavandería, etc.."
Como siempre, prosigue Intersindical, de manera atropellada, la puesta en marcha corre a cargo de una Gerencia que a día de hoy, se encuentra dimitida desde hace casi un mes, sin que se haya producido nombramiento del nuevo cargo y ello, contraviniendo las recomendaciones de la consejería de Sanidad, trasladadas a Intersindical Canaria en reunión mantenida el día 20 de enero, en el sentido de esperar a que la entrega de la obra se haga cumpliendo todos los requerimientos técnicos, de dotación de recursos materiales y humanos necesarios para el buen funcionamiento de las instalaciones, lo que da una idea del actual estado de descoordinación existente en materia sanitaria y de que, como en otros muchos casos, la inauguración obedece más a una acción propagandística que a una preocupación por solventar globalmente las demandas de pacientes y profesionales de la sanidad