Los hechos ocurrieron cuando, ante la reiterada pasividad de la empresa en atender las demandas de protección por parte de los trabajadores, el secretario general de la sección sindical de FSC-CCOO en la empresa, Enrique Espi, inició una campaña para obtener equipos de protección personal gracias a la generosa donación de distintas empresas y entidades. Fue entonces cuando la empresa, a instancias de Gestión Sanitaria de Canarias (GSC), le hizo una advertencia de sanción por dejar expuesto de forma tan evidente la falta de material de protección, de medidas de actuación y de formación específica ante el Covid-19.
Según señala Enrique Espi, en respuesta a esa advertencia de sanción, los servicios jurídicos de FSC-CCOO remitieron un escrito a GSC, sin que esta haya respondido, en lo que supone una muestra más de que la empresa trata de eludir responsabilidades e intenta evadirse de las múltiples denuncias que los trabajadores han interpuesto por incumplir las normas de seguridad, prevención y formación específica.
Los trabajadores de la empresa han pedido además a Gestión Sanitaria de Canarias que proceda a la realización de pruebas de detección de Covid-19 a todo el personal del sector de ambulancias, dada la alta exposición al riesgo que sufren estos trabajadores en el ejercicio de sus funciones.
FSC-CCOO denuncia la situación de "absoluto desamparo" con los que los trabajadores de Aeromédica están realizando su trabajo por el "exclusivo afán de la empresa de obtener beneficios económicos aun a costa de los riesgos que asumen los trabajadores". Señalan que de esta situación no es menos responsable Gestión Sanitaria de Canarias que, de forma subsidiaria, tiene la responsabilidad sobre las empresas que prestan este servicio y deben garantizar de forma urgente que este se preste con las garantías en materia de prevención y seguridad que vienen marcando las autoridades sanitarias en referencia al Covid-19.