La acción se está desarrollando desde el 24 de noviembre y finalizará el 5 de enero del próximo año, y cuenta con ocho monitores que están visitando las zonas de afluencia de jóvenes, en determinados horarios, a lo largo de los cinco distritos del municipio.
El alcance de este proyecto busca facilitar información sobre las medidas establecidas por las distintas autoridades sanitarias respecto a la contención de la COVID-19 y la necesidad del cumplimento de dichas medidas. Además, se busca concienciar a los jóvenes de la gravedad de la situación y la necesidad de protegerse tanto ellos y ellas, como a las personas que les rodea.
Fomentar el uso de las mascarillas y la importancia de su utilización de forma correcta; Concienciar de la importancia que tiene la higiene de manos, y la necesidad del lavado continuo de las mismas; Fomentar la creación de grupos estables de amistad e informar sobre el protocolo a seguir en el caso que sospechen que padecen la enfermedad o sean positivos, son las principales recomendaciones que trasladan los informadores a los adolescentes.
La concejala de Educación y Juventud, Claudia Reverón, apuntó que "los informadores se acercan con mucho respeto y empatizando con la etapa evolutiva en la que se encuentran nuestros jóvenes". Y añadió, "hay un aspecto que consideramos fundamental, y es el que no se sientan juzgados, dado que el que tengan esa percepción dificultará el trabajo e irá en contra de los objetivos que nos hemos establecido con este proyecto".
"Los informadores son también jóvenes, y de lo que se trata es que el diálogo sea en su mismo idioma, que no se les vea como agentes sancionadores, sino como jóvenes concienciados que transmiten información y formación sin ser sancionadores de la administración", destacó la edil.
Por último, el proyecto "Informadores juveniles COVID-19" cuenta con una potente campaña de comunicación, principalmente, en redes sociales y medios digitales.