En las concentraciones se ha denunciado que no hay ni recursos, ni medios ni profesionales suficientes en los hospitales públicos, lo que genera numerosos problemas y deficiencias que impiden poder ofrecer una atención sanitaria y unos cuidados de calidad a toda la ciudadanía.
Esperas de semanas y meses para ser atendido en una consulta, realizarse una prueba diagnóstica o ser intervenido, saturación y situaciones de colapso en servicios especialmente sensibles, como las Urgencias, camas en pasillos o cerradas en verano... son algunas de las lamentables consecuencias de la falta de interés de administraciones y partidos políticos por reforzar y mejorar la sanidad pública de nuestro país.
Una inaceptable realidad que viven y sufren diariamente las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas que trabajan en los hospitales y que también repercute gravemente en su salud física, psicológica y emocional, al estar en una permanente situación de sobrecarga, saturación y tensión asistencial que les imposibilita realizar su labor asistencial y de cuidados como les gustaría.
"¿Cómo vamos a poder atender y cuidar en óptimas condiciones si somos un profesional para hasta 25 y 30 pacientes ingresados en un hospital?, se preguntaban las enfermeras y enfermeros concentrados, recordando que todos los estudios científicos nacionales e internacionales conocidos concluyen que la ratio segura es la de 6-8 pacientes por cada enfermera o enfermero en una planta de hospital.
Profesionales sanitarios que, además de tener contratos precarios y temporales en muchos casos, desarrollan su labor asistencial y de cuidados a turnos, de noche y durante los domingos y festivos, con los consiguientes problemas a la hora de conciliar su vida laboral con la personal y familiar. Por ejemplo, una enfermera puede llegar a trabajar hasta 15 noches en un mes con jornadas de diez y doce horas seguidas o realizar más de 40.000 horas de trabajo nocturno a lo largo de su vida laboral.
"Estamos exhaustos y muy afectados a todos los niveles después de dos años de lucha contra la pandemia, y ahora, una vez superado lo peor, contemplamos con absoluta desolación y estupefacción que los mismos que aseguraron que iban a cambiar y mejorar la situación de nuestro sistema sanitario, vuelven a dedicar su tiempo a enfrentamientos partidistas estériles de cara a próximas elecciones en lugar de priorizar lo que realmente nos importa y preocupa a todos y todas, como es nuestra salud y bienestar".
Tras el éxito de la convocatoria de hoy en los hospitales, y de la realizada días atrás en los centros de salud, el Sindicato de Enfermería, SATSE, continuará en Canarias y en el conjunto del Estado su nueva estrategia de acciones reivindicativas y movilizaciones en defensa de la sanidad y sus profesionales, las cuales irán aumentando en intensidad a lo largo de los próximos meses. "Exigimos soluciones y nadie nos va a parar hasta conseguirlas", concluyen desde la organización sindical.