Este hecho ocurrido en el Término municipal de Santa Brígida, lugar donde se llevaron a cabo varios apostaderos por parte de la Guardia Civil, con el resultado de la incautación de seis jaulas trampa (falsete), que se encontraban armadas y listas con 6 canarios del monte (Serinus canaria) y un jilguero o pájaro pinto (Carduelos carduelis) utilizados como reclamo para atraer a nuevos especimenes. Dichas jaulas trampas tiene la capacidad de captura de 12 ejemplares.
Una vez identificada el presunto autor, se procedió a denunciarlo por tales hechos por una supuesta infracción administrativa contra la Ley 7/1998, de Caza de Canarias.
La denuncia fue remitida a la Consejería de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria, así como las aves incautadas serán remitidas al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre del Cabildo de Gran Canaria y las jaulas se procederán a su destrucción.