El servicio, efectuado por el Grupo de Información y Apoyo a la Seguridad (GIAS) del Cuerpo General de la Policía Canaria, se inició debido a las numerosas quejas vecinales recibidas por el trasiego y afluencia de personas en el local hasta altas horas de la noche.
Tras comprobar la veracidad de los hechos se procedió a identificar al responsable del local, que carecía de autorización para la práctica de la actividad y se amparó en que se trataba de una asociación de juegos mentales.
En la actuación policial, en la que se identificó a un total de once personas, se intervino 3.000 fichas para apuestas, 141 euros, numerosos juegos de carta, mesa para juego de póquer y otros enseres.
El dispositivo policial culminó con la realización de la correspondiente acta e informe policial, que fue remitido al Servicio de Inspección del Juego y la Apuesta de la Comunidad Autónoma de Canarias, junto con el material intervenido.