La detonación, que se ha producido sobre las 13.45 horas, no ha provocado heridos, solo pequeños daños materiales. La Policía Nacional está investigando todos los aspectos relacionados con la explosión, como la composición del artefacto y la posible autoría.
Desde el Arzobispado de Zaragoza han precisado a Europa Press que no poseen ningún tipo de información y que los agentes se encuentran en el interior de la basílica.
Según informa el Heraldo de Aragón en su edición digital, los agentes está inspeccionando los aparcamientos que hay en la plaza del Pilar y no dejan salir a los vehículos estacionados en su interior.
Un concejal vio a dos chicos salir corriendo
El portavoz de IU en el Ayuntamiento de Zaragoza, José Manuel Alonso, ha explicado a Efe que vio a dos chicos salir corriendo de la basílica del Pilar nada más escucharse una explosión en el interior del templo, mientras que el resto de ciudadanos lo hacía de forma tranquila.
Alonso ha detallado que pasaba a escasos metros de la Basílica cuando ha escuchado una explosión "bastante considerable" e inmediatamente ha visto salir a los dos chicos "como alma que lleva el diablo" y segundos después al resto de visitantes de forma "tranquila y sin pánico", lo que le ha resultado "raro".
En el interior del templo, donde al parecer se encontraban de visita alumnos de un colegio de la ciudad, el concejal ha observado una gran humareda en la zona del órgano.
Alonso ha indicado que un vigilante de seguridad de la basílica le ha comentado que podía tratarse de un artefacto pirotécnico.
La policía ve similitudes entre este atentado y el artefacto colocado en la catedral de la Almudena, en Madrid.
En febrero de este año, la policía desactivó en la Almudena una bomba compuesta por un detonador y 1.200 gramos de explosivo. Su colocación fue reivindicada por un grupo anarquista autodenominado Comando Insurreccionalista Mateo Morral, que al reivindicar la acción dijo que quería "dar caña a la monarquía borbónica en sus lugares sagrados".